Se abordará la violencia en el deporte, el acoso en las redes sociales, la violencia en el diálogo entre religiosos o la corrupción y la violencia y un amplio programa cultural
MADRID, 30 Oct. (EUROPA PRESS) -
Una audiencia del rey Felipe II abrirá la segunda edición del Foro Mundial sobre Violencias Urbanas y Educación para la Convivencia y la Paz, que se celebrará del 5 al 8 de noviembre en Matadero, que cuenta ya con más de 2.700 inscritos, más de 700 de ellos de origen internacional; la participación de la Nobel de la Paz 2015 Ouied Bouchamaoui; la experiencia de Proactiva Open Arms o la de la ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribero, en un evento paralelo sobre la financiación para el cambio climático.
La alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, y el exdirector de la UNESCO y presidente de la Fundación Cultura de Paz, Federico Mayor Zaragoza, han presentado este martes esta segunda edición, que arrancará el día 5 a las 13 horas con esa audiencia del rey en la Zarzuela, a la que asistirá una delegación de representantes de las entidades que componen el comité organizador internacional, encabezada por la regidora madrileña, impulsora del foro.
Un total de 96 talleres y una treintena de eventos paralelos, todos gratuitos, darán vida a este segundo foro. Serán conducidos por nombres propios del periodismo español --todos ellos participarán de forma altruista-- y darán paso a debates sobre la violencia en el deporte, con el exjugador Michael Robinson o el testimonio de Raúl Sánchez, tetrapléjico tras una agresión durante un partido de fútbol entre veteranos; el acoso en las redes sociales; la violencia en el diálogo entre religiosos, con el arzobispo de Madrid, Carlos Osoro, y líderes de las distintas comunidades religiosas; la corrupción y la violencia...
El último plenario tendrá un color, el violeta, porque se dedicará a las mujeres. Será el día 8 con una mesa redonda de alcaldesas y mujeres que dialogarán sobre cómo construir ciudades en paz. Carmena ha destacado que su deseo es que este foro "se quede definitivamente" en la ciudad y que se convierta en una de sus señas de identidad. "La violencia es el virus definitivo de la democracia", ha defendido la alcaldesa.