El 52% de los consumidores es fiel a sus establecimientos habituales, frente a un 6,1% que prefiere probar sitios nuevos
MADRID, 23 Jul. (EUROPA PRESS) -
El 90% de los españoles reconoce que acude a bares y cafeterías diurnos al menos una vez al mes, mientras que cae al 40% los que visitan establecimientos de ocio nocturnos, según se desprende de la segunda edición del estudio 'La percepción de la hostelería en España', elaborado por la Fundación Cruzcampo.
En concreto, las visitas a cafeterías y bares de tapas superan considerablemente las de pubs u otros locales de copas. Esta tendencia positiva en la hostelería diurna no es indiscriminada, ya que el consumidor reconoce ser más exigente a la hora de valorar un establecimiento.
Así, la relación calidad-precio es el aspecto más importante para el 70% de los encuestados, seguido por la calidad de la restauración (60%) y las instalaciones, el ambiente y la imagen que proyecta el local (aproximadamente el 50% de las respuestas).
La cordialidad y la eficiencia siguen siendo dos cualidades imprescindibles en un camarero profesional, cobrando incluso más importancia que en 2017.
El informe muestra que el perfil del consumidor está cambiando, ya que cada día está mejor informado, es más exigente con la calidad de servicio, expresa su opinión y considera imprescindible que los profesionales de hostelería estén formados.
LA CERVEZA, REINA DEL APERITIVO
Respecto a la relevancia del consumo de cerveza en hostelería muestra que casi el 90% asegura tomar cerveza con o sin alcohol, y demuestra una cultura cervecera y una exigencia en cuestión de calidad y 'perfect serve' cada vez mayor. Así, considera esencial que se trate de una marca de su gusto y que esté a la temperatura adecuada ("muy fría") y bien tirada.
Además, el consumidor español valora de forma "muy positiva" la hostelería española, a la que sitúa por encima de los extranjeros, ya que destaca aspectos como la elaboración de los platos e ingredientes utilizados (70%), los precios (63%), la creatividad/innovación en su oferta (50%), el trato de los responsables de atención al cliente (49%) y la profesionalidad del personal de atención al público (32%).
Por otro lado, los españoles (52%) son fieles a sus establecimientos habituales, frente a un 6,1% que prefiere variar y probar sitios nuevos.
El informe define a un consumidor cada vez más proactivo, que siente que juega un papel relevante como prescriptor y sabe que sus opiniones son cada vez más importantes para los hosteleros a la hora de captar nuevos clientes. Así, casi la mitad de los encuestados que cambian de establecimiento con cierta frecuencia reconoce publicar opiniones en Internet cuando el lugar le gusta o decepciona especialmente.