LOGROÑO, 16 Sep. (EUROPA PRESS) -
El control de la maduración de la uva realizado por el Consejo Regulador de la DOCa Rioja el pasado lunes -día 14 de septiembre- ha permitido constatar un avance muy significativo en la maduración alcohólica con un incremento medio de entre 0,7 a 1,3 % volumen acompañado de un descenso de la acidez y un ligero aumento del pH.
El Consejo Regulador informa en una nota de prensa que se constata así un diferente comportamiento en función de la disponibilidad hídrica de los viñedos, manteniendo mejor la acidez en los que disponen de agua y no observándose una maduración alcohólica tan explosiva.
Es muy significativa la lenta evolución madurativa en los viñedos con producciones altas, afirman.
Por su parte, se confirma un peso de la baya estabilizado, siendo éste algo superior al de la pasada campaña.
Además, explican, nos posicionamos en estos momentos en fechas más adelantadas que la pasada campaña. Se evidencia, por los datos de maduración y por la entrada de uva en bodega, que se sitúa en 10 millones de kg más que en la pasada campaña en esta misma fecha.
Pablo Franco, director del Órgano de Control, confirma el "buen estado sanitario del viñedo". "Vegetativamente se han visto los primeros síntomas de estrés hídrico en puntos muy localizados" por lo que recalca Franco "la importancia de mantener la vigilancia".
Así se indica en las conclusiones del cuarto Boletín de Maduración editado por el Consejo y que realiza este control al servicio del sector vitivinícola riojano.
El Consejo irá extendiendo al conjunto de la Denominación en las próximas semanas este control de maduración, un importante servicio que permite a los viticultores determinar la fecha idónea de vendimia en cada localidad y optimizar así la calidad del fruto y de los vinos elaborados.