El Comercio Justo facturó 77 millones de euros en 2018 en España, un 53% más gracias al textil y cosmética
MADRID, 26 Sep. (EUROPA PRESS) -
Los españoles gastan, por persona y año, una media de 1,67 euros en productos de Comercio Justo, mientras que la media de la UE está en 15,1 euros. Los españoles se quedan muy lejos también del país que más gasta en este mercado: Suiza, con más de 80 euros de media por persona y año.
Así se desprende del informe 'Comercio Justo en España 2018', elaborado por la Coordinadora Estatal de Comercio Justo y que destaca, sin embargo, el crecimiento progresivo que desde 2014 se ha registrado en este mercado.
Concretamente, las ventas de productos de Comercio Justo han aumentado en España un 53% en 2018, con respecto al año anterior, gracias, en gran medida, al "importante crecimiento" de sectores como el textil orgánico o la cosmética natura. En total, el año pasado, se facturaron 77 millones de euros gracias a este mercado.
Esta subida de 2018 es la más importante desde que se tienen registros, según ha indicado el miembro de la Junta Directiva de la coordinadora, Alberto Abad. A pesar de este aumento, el consumo de Comercio Justo en España es diez veces menor que en Europa y sólo Polonia tiene peores datos.
En el acto de presentación del informe, Abad ha indicado que la alimentación sigue siendo la gran protagonista del Comercio Justo, con un 95% de las ventas. El cacao, el azúcar y el café siguen siendo los productos más reclamados por los clientes de este mercado. De hecho, el cacao y sus derivados suponen el 63,5% de la facturación total anual y el café el 25%.
El documento destaca que el pasado año se ha incorporado a este sector el producto fresco, principalmente la fruta, unos productos que "han entrado con fuerza" generando en su primer año un 1,3% del total de las ventas.
LOS SUPERMERCADOS, PRINCIPALES ESPACIOS DE CONSUMO
Sin embargo, quien verdaderamente ha destacado en 2018 es el sector textil, cuya facturación, tal y como ha indicado Abad, ha superado el millón de euros. "Esto se debe a la iniciativa de empresas convencionales que han empezado a elaborar artículos de Comercio Justo", ha declarado, para señalar también el aumento de los productos de cosmética, que han supuesto el 1,1% de las ventas.
Otros de los cambios que ha registrado el estudio de 2018 es que los supermercados se han convertido en el espacio de consumo más utilizado (66,5% de las ventas), por delante del sector de la hostelería, catering y restauración (19,8%) y los establecimientos minoristas (12%).
Este aspecto preocupa a la coordinadora. Su vicepresidenta, Mónica Gómez, cree que esta importante presencia de los supermercados se debe a los hábitos de consumo de la sociedad actual, pero reconoce que no es lo que ellos buscan. "Haremos lo que esté en nuestra mano para potenciar otros cauces de consumo más sostenibles", ha apuntado.
En este sentido, Gómez ha destacado también la labor de las tiendas de Comercio Justo, que han supuesto el 6,2% de las ventas y que, tal y como ha señalado, tienen una labor "más allá de los datos de facturación". Para la vicepresidenta de la Coordinadora Estatal de Comercio Justo, estos establecimientos son "espacios esenciales para el movimiento" porque "permiten la relación directa con el público consumidor y el desarrollo de iniciativas de concienciación y movilización social".
Gómez ha recordado la importancia de consumir Comercio Justo y el impacto que este mercado tiene en personas concretas. En su intervención ha puesto ejemplos con diferentes cooperativas de Uganda, Nicaragua y Perú, en donde sus trabajadores destacan la "estabilidad" que genera que se les pague "un precio justo" por sus productos, así como las consecuencias que supone para las generaciones posteriores esta situación.