BRUSELAS, 23 Feb. (EUROPA PRESS) -
El pueblo saharaui "nunca ha sido consultado ni obtiene beneficio alguno" del acuerdo pesquero entre la UE y Marruecos que permite a los buques comunitarios, en su mayoría españoles, faenar en aguas de Sáhara Occidental, según denunciaron hoy en Bruselas la activista saharaui Aicha Dahana y la ONG Western Sahara Resource Watch, que exigieron a las instituciones europeas que no antepongan "intereses económicos" al respeto de los Derechos Humanos.
Tras meses de especulaciones, los servicios jurídicos de la Eurocámara comparecieron este lunes ante la comisión de Pesca del Parlamento Europeo para reconocer públicamente que "no hay pruebas" que indiquen que este acuerdo pesquero "beneficie a la población local" de Sáhara Occidental, a pesar de que así lo exijan las leyes internacionales.
Varios eurodiputados respondieron con la amenaza de bloquear la renovación del acuerdo, que expira en febrero de 2011, si las autoridades marroquíes y el Ejecutivo comunitario no aportan "información" de que este convenio repercuta positivamente en la población de Sáhara Occidental.
Marruecos recibirá un total de 140 millones de euros de las arcas comunitarias por los cuatro años del acuerdo pesquero, pero las autoridades marroquíes deben comprometer parte de esta ayuda al sector pesquero.
Sin embargo, según denunció Dahane, "no hay beneficio, no hay nada" para la población "real" de Sáhara Occidental y aseguró "no conocer a nadie" de este territorio ocupado que trabaje para el sector pesquero, pero sí apuntó que hay "marroquíes que se han trasladado" a la zona para ocupar algún puesto ligado a la actividad pesquera comunitaria.
La activista saharaui recriminó a la UE que suscriba acuerdos pesqueros "sin preguntar a los verdaderos dueños de esos peces" y le acusó de "estar pagando el dinero al poder gubernamental equivocado".
Dahane recordó que de acuerdo a Naciones Unidas el pueblo saharaui no sólo debe beneficiarse, sino que debe ser consultado sobre la explotación de sus propios recursos, algo que la asesoría de la Eurocámara tampoco "ve claro".
Por su parte, la representante de la ONG Western Sahara Resource, Sara Eyckmans, pidió a las instituciones que "no ignoren" la valoración de los servicios jurídicos del Parlamento Europeo y que los buques europeos "cesen de inmediato" su actividad en aguas del mar saharaui hasta que se revisen los términos del acuerdo.
En la comparecencia también participó el eurodiputado portugués Miguel Portas (Izquierda Unitaria), quien recordó que la pesca es un recurso "muy importante y estratégico" para Sáhara Occidental y criticó la "triste política" de la UE que "pretende hacer negocio por encima de un pueblo".
"No es comprensible que un Estado que ha ocupado un territorio pueda beneficiarse económicamente con una compensación de la UE", insistió el eurodiputado, que consideró "incomprensible" esta premisa.
También censuró la actitud de las instituciones por haber "mantenido en secreto" el informe jurídico durante meses por el interés de "algunos estados" de evitar enfrentarse a la "realidad".
Portas emplazó a la opinión pública a "obligar" a la Unión Europea a responder a esta cuestión y anunció una "gran manifestación europea" en apoyo del pueblo saharaui y en contra del acuerdo pesquero y del estatuto avanzado a Marruecos que tendrá lugar en Granada el próximo mes de marzo, en paralelo a la cumbre UE-Marruecos prevista en esa ciudad.