Advierte de que la crisis climática aumenta el riesgo de conflictos de violencia de género
MADRID, 12 Nov. (EUROPA PRESS) -
Acción contra el Hambre ha reclamado "medidas decisivas" para combatir la desnutrición, que ha apuntado que "se está agravando aún más en todo el mundo debido a la crisis climática".
Así lo ha puesto de manifiesto la organización como consecuencia de la Conferencia del Cambio Climático de Naciones Unidas COP29 que se celebra en Azerbaiyán. En este sentido, ha destacado que "el creciente número de fenómenos meteorológicos extremos relacionados con el clima, como sequías, inundaciones y olas de calor, está amenazando la seguridad alimentaria de millones de personas, en particular mujeres y niños".
Asimismo, ha explicado que, actualmente, 733 millones de personas ya padecen hambre. "La crisis climática está aumentando el riesgo de padecer hambre y desnutrición en todo el mundo, especialmente en países ya afectados por conflictos y pobreza. La acción contra el hambre y la desnutrición debe convertirse en un componente central de la política climática", ha afirmado el director general de Acción contra el Hambre, Olivier Longué.
Además, Longué ha agregado que las comunidades más pobres y vulnerables son las que más sufren los efectos del cambio climático. "La COP29 debe garantizar que la financiación de la lucha contra el cambio climático llegue directamente a las personas más afectadas", ha subrayado.
Por ello, Acción contra el Hambre ha pedido "a los países ricos responsables de la crisis que estén a la altura de su responsabilidad histórica y proporcionen fondos suficientes para apoyar a las comunidades afectadas por la crisis climática". "Estos fondos deben ser proporcionados directamente a las comunidades afectadas", ha apuntado.
La organización ha indicado que los participantes en la COP29 "deben centrarse en una transformación de los sistemas alimentarios con igualdad de género que sitúe la agroecología en el centro". "Los indicadores para la Meta Global de Adaptación (GGA) también deben incluir la seguridad alimentaria y nutricional, por ejemplo, midiendo los costes de las dietas saludables, el acceso a la atención médica y el progreso hacia la agroecología. En contextos vulnerables, se necesitan sistemas de alerta temprana adaptados a los distintos riesgos", ha asegurado.
En esta misma línea, ha advertido de que los impactos de la crisis climática afectan especialmente a las mujeres y otros grupos vulnerables. "Ellas suelen tener menos acceso a los recursos, pero son quienes tienen que procurar alimentos, agua y leña para sus familias. Muchas viven de la agricultura: las malas cosechas o las temporadas de cultivo complicadas debidas a la crisis climática golpean a las mujeres con especial dureza", ha expuesto.
Finalmente, ha avisado de que la crisis climática aumenta el riesgo de conflictos y también el riesgo de violencia de género. También ha afirmado que ello ha demostrado tener un "impacto negativo" en el estado nutricional de mujeres y niñas. "Por lo tanto, la COP29 debería tener en cuenta los impactos específicos de género de la crisis climática y adoptar medidas específicas para apoyar a las mujeres y a los grupos vulnerables", ha concluido.