El consumo medio de cada persona en España durante 2023 fue de 3,2 euros, destinados sobre todo a artículos de alimentación (cacao y dulces)
MADRID, 8 Dic. (EUROPA PRESS) -
El Comercio Justo en España obtuvo una facturación de 156,2 millones de euros durante el año 2023, lo que supone un crecimiento de 10 millones de euros, un 7% más respecto al año anterior, "recuperando fuerza" tras "el parón" que supuso la pandemia de la Covid-19, según los datos publicados por la Coordinadora Estatal de Comercio Justo (CECJ).
Según señala la Coordinadora, desde 2020, la facturación de Comercio Justo en España no había dejado de crecer pero "su ritmo se había estancado", registrándose aumentos de "entre el 0,3% y el 1%". Sin embargo, destaca que, en el último año, el sector "ha recuperado fuerza con un incremento del 7% respecto a 2022".
En este sentido, subraya que este crecimiento se ha producido gracias al aumento de los ingresos de las organizaciones importadoras de Comercio Justo así como de las ventas de productos con sello Fairtrade por parte de empresas convencionales.
Con esta cifra global, el consumo medio por habitante en Comercio Justo en España durante 2023 fue de 3,20 euros.
Por canales de distribución, cerca del 82% del consumo de productos de Comercio Justo se produjo en los supermercados y grandes superficies, que ganan cuota de mercado respecto al último año; el 12,7%, en la hostelería y el 5,1%, en el pequeño comercio, es decir, en las tiendas especializadas de Comercio Justo gestionadas por las organizaciones de la CECJ cuya facturación se mantiene respecto al año anterior en 4,5 millones de euros.
En cuanto a los productos, la alimentación sigue siendo la gran protagonista del Comercio Justo, con más del 96% de las ventas. Dentro de este bloque el cacao y los dulces, que generan el 76,8% de la facturación, son los más vendidos; y el café se mantiene con un 15% de las ventas.
En relación a los productos que no son alimentación, los artículos de textil (ropa y hogar) son los más vendidos con un 2,7% del total. Le siguen los complementos y la decoración, mientras que los productos de higiene y cosmética natural descienden sus ventas ligeramente.
Sobre las certificaciones que garantizan el cumplimiento de los principios del Comercio Justo (derechos laborales, humanos, precios que cubren costes de producción sostenible, prácticas justas y democráticas, cuidado del medio ambiente), el 95,8% de las transacciones procedió de productos con el sello Fairtrade.
Una parte (6,4%) fueron distribuidos por las organizaciones importadoras de la CECJ, pero la mayoría (89,4%) fue fruto de las ventas de empresas convencionales; y el resto corresponde a productos de Comercio Justo con otras certificaciones.
LEJOS DE OTROS PAÍSES EUROPEOS
"Aunque estamos lejos de los niveles de consumo de otros países europeos, nuestro país tiene por delante mucho potencial de crecimiento en el desarrollo del Comercio Justo", ha explicado la directora de la CECJ, Laura Rubio.
Por ejemplo, ha señalado que, en Francia, la facturación de Comercio Justo en el último año ha superado los 2.100 millones de euros gracias, entre otros aspectos, al reconocimiento legal que tiene el sector. Por ello, desde la CECJ reivindican que la futura Ley de Economía Social incorpore también el Comercio Justo.
El mercado de Comercio Justo en España se abastece de manera directa de productos procedentes de 131 cooperativas y organizaciones productoras de 46 países. Los países con los que se genera un mayor volumen comercial son Perú, India, Uganda, Paraguay y Guatemala. América Latina es la región más beneficiada por las compras de Comercio Justo realizadas en España, seguida de África y Asia.
El cacao y el café de Comercio Justo cuentan con una procedencia muy amplia, ya que se producen en 15 países diferentes. En el caso del café destacan por volumen comercial Uganda, Nicaragua y Guatemala, y el caso del cacao, República Dominicana, Costa de Marfil y Perú. De este último, también se importa la mayor cantidad de azúcar de caña, junto con Paraguay, Filipinas y Ecuador. Además, los artículos textiles y de artesanía proceden principalmente de Asia, y en particular, de India y de Turquía.