Publicado 11/04/2019 18:56

Una investigación de Acción contra el Hambre avanza hacia una 'app' para diagnosticar la desnutrición a través de fotos

Desnutrición infantil
THE FLICKR/DEPARTMENT FOR INTERNATIONAL DEVELOPMEN


MADRID, 11 Abr. (EUROPA PRESS) -

Una investigación de Acción contra el Hambre, en colaboración con la Universidad Cheik Anta Diop de Dakar y la Universidad Complutense de Madrid, ha sentado las bases científicas para poder diagnosticar la desnutrición a través de una aplicación móvil.

La técnica utilizada es la morfometría geométrica para comparar mediante imagen la forma de un prototipo de niño sano con la de un niño desnutrido, que acaba de ser avalada por la comunidad científica con un artículo publicado en la revista 'American Journal of Physical Anthropology'. Es la primera vez que se aplica esta técnica sobre seres humanos.

La app, que acaba de ser premiada por Fundación Mutua Madrileña como mejor proyecto de innovación digital, permitirá fotografiar a niños y niñas menores de cinco años en lugares remotos o afectados por conflictos y determinar si padece desnutrición aguda mediante fotodiagnóstico. "Esto podría acelerar el paso hacia la erradicación definitiva de la desnutrición en 2030", destacan desde Acción contra el Hambre.

"¿Podríamos salvar más vidas si fuésemos capaces de diagnosticar la desnutrición con un teléfono inteligente? Indudablemente sí. Una de las claves que convierte el hambre de un niño primero en enfermedad y luego, muchas veces, en muerte es precisamente la falta de diagnóstico, sobre todo en lugares donde no hay personal de salud cercano o donde una guerra impide el acceso del personal humanitario", explica el responsable de salud y nutrición de Acción contra el Hambre, Antonio Vargas.

Primero, los investigadores desarrollaron un modelo para capturar la morfología del cuerpo los menores entre 6 y 59 meses. Después, validaron el modelo, para lo que tomaron mediciones y fotografías a cientos de niños en Senegal y España. Tras este estudio, demostraron que el modelo permitía diferenciar la morfología entre las distintas etapas del crecimiento y las dos poblaciones humanas analizadas.

Paralelamente, compararon la forma del niño sano con la del desnutrido, creando un algoritmo que permite calcular con qué probabilidad un menor puede padecer desnutrición. Después, desarrollaron una 'app' que integrara todos estos nuevos conocimientos generados con ayuda de Tyris Software, expertos en desarrollo de inteligencia artificial y tratamiento de imagen, con el objetivo de obtener un diagnóstico en tiempo real del estado nutricional de un menor.

Ahora, están buscando aliados para terminar de desarrollar la tecnología necesaria, ponerla en escala y poder usar esta técnica también en el seguimiento del tratamiento, ya que "la forma de los pequeños puede ser un factor incluso más sensible que las pruebas clínicas para seguir la evolución en los 40 días de tratamiento y un criterio para anticipar posibles recaídas o para dar el alta del tratamiento nutricional", detalla Vargas.

El equipo técnico de Acción contra el Hambre está estudiando también la tecnología de 'blockchain' y tratamiento sucesivo de datos, que "permitiría integrar en la aplicación el pago inmediato a los agentes de salud por cada diagnóstico con imagen realizado". "Esto y la posible aplicación para diagnosticar la desnutrición crónica (hasta ahora se han creado solo los prototipos para aguda) es la nueva vertiente de la investigación que se realizará en Guatemala gracias al apoyo de la Cooperación Española", destacan.