MADRID, 9 Dic. (EUROPA PRESS) -
La ONG Médicos Sin Fronteras ha denunciado que en los últimos días se han producido ejecuciones sumarias dentro del Hospital Amitié de Bangui, la capital de República Centroafricana, perpetradas por hombres armados en el interior del propio centro.
"MSF exige que tanto los pacientes como el personal de salud sean respetados y que no se reproduzcan actos de violencia en las estructuras hospitalarias, tanto en Bangui como en el resto del país", señala el grupo en un comunicado.
En concreto, señala que el jueves pasado, el personal y los pacientes del Hospital Amitié fueron testigos de ejecuciones sumarias, lo que forzó el cese de la actividad del centro. "Nuestros equipos vieron una decena de cadáveres situados frente al hospital", ha relatado Rosa Cristani, coordinadora de emergencias de MSF.
Los heridos de mayor necesidad y parte de los trabajadores fueron trasladados por MSF al Hospital Comunitario de Bangui, pero en el Hospital Amitié quedan todavía algunos pacientes pese a que se han suspendido todas las actividades médicas en el centro.
En el Hospital Comunitario de Bangui "la situación sigue igualmente tensa". "Se han ejercido amenazas y presiones sobre pacientes, personal de MSF y personal del ministerio de Salud", denuncia el grupo.
"Continuamos nuestras actividades, pero esta violencia es inaceptable y un atentado al Derecho Internacional Humanitario. Las amenazas tienen un impacto evidente en la atención médica, ralentizándola y ocasionando que el personal sanitario abandone puestos, que son cruciales", ha denunciado el coordinador general de MSF en Bangui, Thomas Curbillon.
Francia ha anunciado el envío de 1.600 militares a su antigua colonia bajo mandato de la última resolución del Consejo de Seguridad de la ONU, la mayoría de los cuales se encuentran ya en el país. La Unión Africana ha comprometido otros 6.000 militares, 2.500 más de los que tiene actualmente desplegados. Desde el jueves han muerto al menos 394 personas solo en Bangui en una espiral de violencia que enfrenta a milicias musulmanas y cristianas.