BRUSELAS, 24 Abr. (EUROPA PRESS) -
El pleno del Parlamento Europeo ha dado este miércoles su visto bueno a la creación de la nueva Tarjeta Europa de Discapacidad pensada para reforzar los derechos de quienes la posean cuando viajen dentro de la Unión Europea, de modo que se garantice su acceso a condiciones especiales y un trato preferente, por ejemplo, en el transporte o al asistir a espectáculos.
Los eurodiputados reunidos en Estrasburgo (Francia) han aprobado con 613 votos a favor, 7 en contra y 11 abstenciones el acuerdo político alcanzado el pasado febrero entre la Eurocámara y el Consejo (gobiernos) con los detalles para lanzar esta credencial a nivel europeo y reforzar la tarjeta europea que ya existe para el estacionamiento.
En el caso de la tarjeta de discapacidad, se emitirá en un plazo máximo de 60 días y deberá ser reconocida en toda la Unión Europea como título para acceder a las condiciones especiales de que disfruten ya los nacionales del lugar de destino, en los servicios públicos y privados como en el transporte, eventos culturales, museos, centros deportivos o parques de atracciones.
El carnet será expedido por las autoridades nacionales competentes y completará -o sustituirá-- las tarjetas o certificados nacionales existentes, por lo que seguirán siendo las autoridades nacionales las competentes para conceder el estatus de persona con discapacidad.
La Tarjeta Europea de Discapacidad se deberá facilitar tanto en formato físico como digital y los proveedores de servicios deberán informar en formato accesible de las condiciones que se ofrecen a los titulares de dicha tarjeta.
La revisión de la normativa comunitaria va a permitir también una mejora de la actual Tarjeta Europea de Estacionamiento, que deberá tener un formato común obligatorio en toda la UE que sustituirá a las tarjetas de estacionamiento nacionales para las personas con discapacidad y será reconocida en toda la UE.
La tarjeta de estacionamiento deberá ser expedida en un plazo de 30 días aunque los eurodiputados abogan por incluir la opción de solicitar una versión digital disponible en 15 días. Tanto la tarjeta de discapacidad como la de aparcamiento deberán incorporar un código QR para evitar falsificaciones.
Una vez que la nueva normativa reciba también el visto bueno de los Veintisiete será adoptada formalmente y los Estados miembro dispondrán de un plazo de dos años y medio para adaptar sus legislaciones nacionales y tres años y medio para aplicarla.