Una madre y su hijo pasean en bicicleta en un parque de Madrid. - Oscar Cañas - Europa Press - Archivo
MADRID, 10 Oct. (EUROPA PRESS) -
El 47,7 por ciento de los hogares monoparentales españoles se encuentra en riesgo de exclusión o pobreza, frente al 26,6 por ciento del resto de hogares, según se desprende del octavo informe 'Monomarentalidad y empleo' de la Fundación Adecco.
El estudio, que refleja que los hogares monoparentales han crecido un 2 por ciento en el último año hasta registrar 1.878.500, asegura que representan el 10,1 por ciento respecto al total de hogares. Además, destaca que el 82 por ciento de estos hogares está encabezado por mujeres (1.538.200 frente a los 340.100 hogares encabezados por hombres).
La Fundación Adecco ha realizado este informe, basado en una encuesta a 170 mujeres con responsabilidades no compartidas, para "sensibilizar y profundizar" en la situación y los retos que viven los más de 1,5 millones de hogares encabezados por mujeres con responsabilidades no compartidas en España.
Según la evolución del indicador AROPE que mide la situación de riesgo de pobreza y exclusión, los hogares monoparentales están sobrerrepresentados, situándose a más de 20 puntos porcentuales del resto.
Por comunidades autónomas, el estudio señala que las familias monoparentales presentan mayor riesgo de pobreza en Ceuta (89%), Extremadura (80%) y Andalucía (69%).
La Fundación Adecco ha subrayado que la transmisión de la pobreza afecta a los niños que nacen y se crían en un hogar con escasos bienes materiales y con ingresos reducidos, "aumentando la dificultad de salir de dicha situación".
En este sentido, ha destacado que resulta "fundamental" apostar por medidas que protejan a estas familias para que así se desvincule la monomarentalidad de la vulnerabilidad y exclusión a la que son relegadas por falta de apoyos, "sobre todo en una sociedad en máximos de envejecimiento que, paradójicamente, debería apoyar la maternidad de quienes la afrontan en solitario".
EMPLEO Y CONCILIACIÓN
El 36,9 por ciento de las mujeres encuestadas están en desempleo, mientras que casi un 47,7 por ciento se encuentra empleada. Una vez encuentran empleo, la conciliación resulta determinante para poder compatibilizar la vida laboral y personal, sobre todo en el caso de las familias monomarentales pues "son muchas las que aseguran que el mayor problema no es tanto el acceso al empleo sino mantenerlo debido a las necesidades que tienen".
En concreto, el 55 por ciento ha asegurado encontrar dificultades para encontrar una jornada laboral adecuada y que se ajuste a sus responsabilidades familiares. "Las mujeres con responsabilidades no compartidas suelen acceder a empleos de baja cualificación y jornada parcial pues priorizan la flexibilidad y el horario antes que las funciones a desempeñar", ha manifestado la consultora de Fundación Adecco Isabel Pérez.
Por otro lado, las encuestadas han afirmado estar insatisfechas con los siguientes aspectos de su vida: Ocio con amigos (55%), tiempo personal (54%), calidad del sueño (45%) o relación familiar (30%). Además, un 67 por ciento ha asegurado que todas estas cuestiones afectan a la calidad de su trabajo remunerado.
Ante este escenario y dada la "carga mental y del hogar" que tienen la mayoría de estas mujeres al regresar después del trabajo, Fundación Adecco ha defendido que resulta "crucial" apostar por medidas de conciliación y flexibilidad para que el empleo "funcione como freno de la exclusión o pobreza".