MADRID, 25 Mar. (EUROPA PRESS) -
El Real Patronato sobre Discapacidad, a través del Centro de Normalización Lingüística de la Lengua de Signos Española (CNLSE), ha firmado un convenio de colaboración con la Organización de Estados Iberoamericanos para la Educación, la Ciencia y la Cultura (OEI) para "impulsar, dinamizar y normalizar" la lengua de signos en España y en 20 países iberoamericanos.
Para el secretario de Estado de Servicios Sociales e Igualdad y secretario general del Real Patronato sobre Discapacidad, Juan Manuel Moreno, este convenio es "una unión para encontrar algo tan fundamental como son las vías de cooperación y colaboración en el ámbito de la promoción, difusión y normalización de la lengua de signos".
En cuanto al acuerdo, Moreno ha destacado que tiene que ser "un trabajo conjunto a favor de las personas con discapacidad, de sus propias necesidades y de lo que tiene que ser su futuro". Asimismo, ha recordado que en todo el mundo hay casi 70 millones de personas con dificultades auditivas y tan sólo en España son cerca de 400.000 las personas --entre familiares y profesionales-- que requieren del uso de la lengua de signos, de las que 100.000 son personas sordas.
Ante estos datos, ha indicado que el Real Patronato ha concedido en 2013 110.000 euros a la Confederación Nacional de Personas Sordas (CNSE) destinados a la "investigación, el fomento, la difusión y para velar por el buen uso de la lengua de signos española". Además, ha apuntado que se actualmente el Patronato financia con medio millón de euros la plataforma de vídeo-interpretación, que ayuda a los usuarios de lengua de signos realizar gestiones administrativas; y el servicio presencial de intérpretes de lengua de signos, que se ofrece en diversos actos institucionales.
Por su parte, el secretario general de la OEI, Álvaro Marchesi, ha asegurado que este convenio es un proyecto "ambicioso" que tiene un "objetivo enormemente importante" como es "la expresión de la fortaleza de la lengua de signos española". "Este acuerdo que hemos firmado no es un reto sencillo --ha precisado--. Pues conseguir poner en marcha, en cada uno de los 20 países iberoamericanos además de España, una dinamización de la lengua de signos exige un enorme esfuerzo".
El secretario de la Organización de Estados Iberoamericanos ha planteado, como primer paso necesario, que se convoque, en los próximos seis u ochos meses, "una reunión en algún país iberoamericano con aquellos que posean una mayor autoridad en relación a la lengua de signos, para analizar cuáles han de ser las estrategias y las líneas de trabajo con cada uno de los países y lograr una perspectiva de reflexión en común y un trabajo específico".
"Este convenio no puede quedarse sólo en esta firma, sino que tiene que fijar un camino de acción, fijar un calendario y un proyecto específico de aquí a 3 años, para que transcurrido ese tiempo nos volvamos a encontrar y poner encima de la mesa lo que hayamos cumplido y plantear el plan para los años siguientes --ha agregado Marchesi--. Si esto lo logramos creo que habremos dado un impulso enorme a la lengua de signos en los países latinoamericanos y sobre todo, habremos contribuido al respeto de los derechos de las personas sordas, de su lengua, su cultura y su manera de comunicarse".
Por último, Moreno ha subrayado que "España e Iberoamérica están unidos en la lucha por la construcción de una sociedad cohesionada e inclusiva". "Ansiamos una comunidad de personas en la que exista una vida para todos y en la que todos sumen y puedan ejercer sus derechos lingüísticos, y este es el camino a seguir en los próximos meses y años", ha concluido.