MADRID, 8 Jun. (EUROPA PRESS) -
La nueva secretaria de Estado de Igualdad, Soledad Murillo, ha asegurado que se siente "muy afortunada" de formar parte del Gobierno de Pedro Sánchez y ha aplaudido la "valentía" del presidente socialista de "restaurar el Ministerio de Igualdad", una decisión que considera "un enorme reconocimiento al movimiento feminista".
"Incluir el Ministerio de Igualdad es una enorme audacia y un enorme reconocimiento al movimiento feminista", ha subrayado Murillo en declaraciones a Europa Press, tras publicarse su nombramiento este viernes 8 de junio como nueva secretaria de Estado de Igualdad.
Para Murillo, es "un enorme acierto" que el presidente del Gobierno "haya tenido la valentía de volver a restaurar en la estructura ministerial el Ministerio de Igualdad" porque "significa dar valor a la igualdad" y "que las políticas de igualdad no queden en un plano soterrado como estaban".
La nueva secretaria de Estado de Igualdad, que ya participó en el Gobierno socialista de José Luis Rodríguez Zapatero, considera que su nombramiento responde precisamente a un reconocimiento de aquella legislatura en la que se aprobaron "leyes importantísimas como la del matrimonio igualitario, la ley de dependencia, la ley de igualdad o la ley contra la violencia de género".
Murillo fue una de las principales inspiradoras de estas dos últimas leyes que junto con las otras dos, a su parecer, "pusieron los Derechos Humanos y el Estado del Bienestar por encima de otras consideraciones".
Atendiendo a sus principales retos dentro del Ministerio de Igualdad, Murillo ha afirmado que son, principalmente: "vigilar y sopesar" cómo están siendo aplicadas la ley de igualdad y la ley contra la violencia de género; lanzar todas las propuestas que el PSOE había planteado desde el Parlamento; y el Pacto de Estado contra la violencia machista "que se aprobó y no se puso en marcha a pesar de que no suponía ninguna dificultad financiera".
Para Murillo, el anterior Gobierno del PP hizo "dejación de responsabilidades" en este sentido ya que "200 millones eran una anécdota en los Presupuestos Generales del Estado" y, sin embargo, significan mucho, como por ejemplo, que Ayuntamientos y diputaciones puedan aplicar medidas concretas contra la violencia de género como que no haga falta denunciar para beneficiarse de la protección.
También se marca otras tareas, junto a la ministra de Igualdad y vicepresidenta primera del Gobierno, Carmen Calvo, como la ley sobre igualdad salarial propuesta por el PSOE y la transversalidad con el resto de ministerios. Lo que está "claro", a su juicio, es que pueden "cambiar" las cosas y que España se mire "de tú a tú con los países escandinavos" en términos de políticas de igualdad.
Por estos y otros "muchos" elementos, Murillo reconoce sentirse "muy afortunada" y "agradecida" a Calvo por confiar en ella para formar parte de "un Gobierno estimulante" donde "la excelencia ha primado sobre otros criterios" y con "unos ministros y ministras absolutamente volcados en recuperar la dignidad, entendiéndola como el Estado de Bienestar y sus múltiples facetas".
Con respecto al hecho de que sea el Ejecutivo con mayor número de ministras del mundo, Murillo ha destacado que se trata de "un gesto democratizador de las instituciones" y ha puntualizado que no se trata de cumplir "cuotas" porque las mujeres son "la mayoría de la población, con un 51 por ciento". "La anomalía era que las mujeres fueran la excepción y no la regla", ha subrayado, al tiempo que ha insistido en que se deje hablar de cuotas porque de lo que están hablando es "de primar el talento".