MADRID, 12 Nov. (EUROPA PRESS) -
El abogado extranjerista y portavoz de Extranjeristas en red, Francisco Solans, ha pedido "proporción, comedimiento, racionalidad y legalidad" frente a la "histeria antimigratoria" que, a su juicio, ha prevalecido en la respuesta española y europea a los últimos fenómenos que tienen que ver con la llegada de personas migrantes: la llegada de un avión al aeropuerto de Palma de Mallorca y la crisis migratoria entre Polonia y Bielorrusia.
"Si vemos ambos sucesos desde una perspectiva racional y comedida, no parece que nada de esto pase de lo anecdótico, ni merezca más de un breve curioso en los periódicos. Sin embargo la respuesta histérica se ha encargado de convertir simples sucesos en acontecimientos de primera plana", subraya en un texto recogido por Europa Press.
En concreto, considera que en Palma se ha montado "un operativo absolutamente desproporcionado". "Pensando sin duda que se le han colado 20 terroristas cargados de armas de destrucción masiva que habían conseguido colar por los controles mediante argucias propias de villano de película, cierran el aeropuerto durante tres horas, afectan el tráfico aéreo de toda Europa, consiguen pillar a unos pocos y los llevan al juez, el cual les acusa, nada más y nada menos, que de sedición", señala Solans.
Por otro lado, en cuanto a la frontera entre Polonia y Bielorrusia, el abogado precisa que Lukaschenko, "emulando a Mohamed VI que ya había ensayado la fórmula en Ceuta" pretende "hacerle pupa a Polonia y a la UE concentrando a 1.000 inmigrantes de Oriente Medio en la frontera. Mil inmigrantes a la puerta de una Europa de 500 millones de personas".
Ante esta situación, según indica Solans, "el gobierno polaco, de extrema derecha, poco dado a políticas racionales y comedidas, sometido a multas por su deriva autoritaria, aprovecha la ocasión para llevar a la zona a cientos de policías y al ejército, declarar un estado de emergencia privando a ONGs y periodistas el acceso a ejercer derechos básicos, y reclama la intervención de la OTAN y de la UE". "De nuevo, pura histeria", valora.
Si bien, apunta que esto "no es nuevo" y que, si se repasa el contexto completo del ordenamiento jurídico en la materia, se encuentra "que esos tintes de descontrol emocional se encuentran por doquier: el afán de expulsar por una simple falta de permiso, la sujeción extrema a control de derechos a seres humanos, el trato degradante y humillante a seres humanos por el mero hecho de ser extranjeros". "El viejo círculo vicioso de fomentar el miedo para justificar las medidas que fomentan el miedo", añade.
Frente a este tipo de respuestas, el abogado extranjerista pide "proporción, comedimiento, racionalidad y legalidad". "Si con nuestras leyes en las manos se hubiera respondido así, los señores del avión de Palma hubieran sido devueltos a Marruecos con un expediente sancionador rápido y a los 1.000 de la frontera polaca se les hubiera atendido, escuchado en sus solicitudes de asilo, repartido por el extenso territorio de la Unión, y aquí paz y después gloria", zanja.