MADRID 26 Nov. (EUROPA PRESS) -
La Comisión Española de Ayuda al Refugiado (CEAR) ha reclamado al Gobierno un plan integral de acción coordinado a nivel estatal que, junto a las comunidades autónomas y los ayuntamientos, pongan fin al "colapso del sistema de protección internacional" y dé "respuestas adecuadas a las diferentes situaciones" de estas personas, especialmente aquellas que deben vivir en la calle.
Desde CEAR lamentan que no existan unas "políticas migratorias adecuadas" cuando, según las últimas cifras oficiales, "más de 93.000 personas solicitaron protección internacional en España" el año pasado.
Por el contrario, denuncia, existe una falta de disponibilidad y flexibilidad de vías de migración ordenada, una falta de una política de visados efectiva, obstáculos en los procedimientos de reunificación familiar, carencia de acuerdos bilaterales y falta de planes de movilidad laboral flexibles y de mecanismos que permitan la estancia temporal apropiada por motivos humanitarios.
Esta situación es, a su juicio, la que está provocando que "que miles de personas" que llegan a España recurran a la vía del asilo para poder entrar y permanecer en él. "En estos momentos, es la única opción práctica existente", apuntan.
Del mismo modo, señalan que esta carencia de medidas "incrementa la situación de vulnerabilidad de las personas migrantes y refugiadas, generando graves distorsiones en el sistema de protección internacional" del país que, según explica, "se está viendo obligado a dar respuesta a miles de personas a un ritmo cada vez mayor".
COLABORACIÓN ENTRE ADMINISTRACIONES
"A todo ello, se suma el colapso en la tramitación y resolución de las solicitudes de asilo que impide una gestión de los procedimientos en los plazos legalmente establecidos, provocando una clara disfunción en el sistema de acogida", apunta la comisión.
Por todo ello, urge al Gobierno a establecer un sistema ágil que permita que todas las personas que lo necesitan sean atendidas conforme a las obligaciones legales; y apunta la necesidad de una participación coordinada y efectiva de las autoridades estatales, autonómicas y locales para identificar adecuadamente a los migrantes en situación de vulnerabilidad.
"Para ello es necesario la colaboración de todas las administraciones de cara a la puesta en marcha de recursos que permitan una acogida digna y evitar hacer de esta situación un reproche mutuo, situando a las personas por encima de los intereses políticos", ha concluido CEAR.