BRUSELAS, 5 Ago. (EUROPA PRESS) -
La Comisión Europea ha expresado preocupación por el bienestar de las 121 personas que siguen a bordo de un barco de Proactiva Open Arms tras ser rescatados por la ONG en el Mediterráneo y ha apelado a la normativa internacional y nacional para permitir su desembarco.
El Gobierno español no ha remitido al Ejecutivo comunitario ninguna petición para ayudar a coordinar los esfuerzos para agilizar el desembarco y distribución posterior de inmigrantes entre países de la UE, como ha hecho en el pasado en otros casos, incluido en el caso del barco 'Alan Kurdi' este domingo.
"La Comisión no ha recibido una petición para hacer la coordinación respecto a las personas que están actualmente a bordo del barco de Open Arms", ha explicado en rueda de prensa la portavoz del Ejecutivo comunitario, Mina Andreeva.
El Ejecutivo comunitario ha reconocido estar "preocupado" por "el bienestar de la gente a bordo" y ha apelado al Derecho Internacional y nacional para resolver la cuestión de su desembarco, al ser preguntado si cree que España debería autorizar su desembarco después de que la Generalitat Valenciana haya indicado su disponibilidad a ofrecer un puerto para ello.
"La Comisión no tiene competencias en la cuestión del desembarco. Esto es una cuestión del Derecho Internacional y nacional", ha subrayado Andreeva.
La embarcación de la ONG catalana rescató el pasado jueves a 55 personas y, un día después, a otras 69 personas "con signos inequívocos de violencia" sufrida en Libia, entre las que había dos mujeres embarazadas que fueron evacuadas por la Guardia Costera italiana este sábado. Por todo ello, ha reclamado de forma "urgente" un puerto seguro para poder desembarcar al resto.
El barco 'Akan Kurdi' de la ONG alemana Sea Eye sí recibió este domingo la autorización de Malta para desembarcar a 40 personas en este país, tras cuatro días de espera, un caso cuya resolución sí ayudó a coordinar la Comisión tras recibir una petición para ello.
El Ejecutivo comunitario ha mostrado su agradecimiento a Malta por permitir el desembarco de estas personas y a Alemania, Francia, Portugal y Luxemburgo por su "solidaridad".
"Claramente este resultado positivo es el resultado de los esfuerzos de coordinación intensos de la Comisión y de las respuestas positivas de los estados miembro en este caso", ha subrayado Andreeva.