El ministro afea a la Comunidad de Madrid que obligue a los desplazados ucranianos a desplazarse al Zendal para la atención social y médica
MADRID, 13 Jun. (EUROPA PRESS) -
El Ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, ha defendido este lunes la reforma que está preparando su departamento de la Ley de Extranjería y que incluiría la regularizar a los extranjeros sin papeles que se formen en sectores en los que no hay trabajadores. A su juicio, este arraigo por formación es una buena medida para evitar situaciones de economía sumergida o violación de Derechos Humanos que se pueden dar en la actualidad.
Durante su intervención en el desayuno informativo de Nueva Economía Fórum, el responsable de Inclusión ha señalado la necesidad de hacer estas modificaciones ante las "anomalías" que presenta ya esta norma cuya última modificación, según ha apuntado Escrivá, data del año 2000, "cuando apenas había inmigrantes en España".
A su juicio, la exigencia de tres años de residencia para conceder a los extranjeros el arraigo social en España es "razonable", pero no ve igual "lo que viene después" en relación al mercado de trabajo que son, según ha explicado, "periodos largos" de un "promedio de siete años" para la inclusión "propiciando la economía sumergida o la violación de derechos humanos".
En este sentido, ha explicado que la reforma se está planteado "de urgencia" y ya se ha negociado con los agentes sociales. Además, ha explicado que pronto termina la consulta pública y que, aunque se siguen haciendo "ajustes" dentro del Gobierno, "la acogida es muy positiva desde prácticamente todos los ángulos" que él, según ha apuntado, ha percibido.
Del mismo modo, ha indicado que esta propuesta de "arraigo por formación" está "inspirada" en algunos de los países del entorno en los que "mejor han trabajado" en esta sentido. Así, ha puesto como ejemplo a Alemania que, a su juicio, es "una referencia en cómo interacciona" ante el "binomio migración regular y protección de los derechos humanos".
SOBRE EL TRABAJO DE LOS JÓVENES
Preguntado si la inclusión de extranjeros al mercado de trabajo elimina las oportunidades de los jóvenes españoles, tanto en el caso de la reforma de esta norma como en el de la integración de los refugiados ucranianos, el ministro ha respondido señalando que esa afirmación "no tiene sustento empírico" y ha puesto como ejemplo la inclusión de la mujer al mercado laboral en las últimas décadas que, según ha apuntado, "no ha desplazado en el trabajo a los hombres".
En este sentido, ha señalado que "los países que tienen tasas más bajas de paro" son aquellos con "una actitud de inclusión" de las personas migrantes al mercado de trabajo.
El ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, ha explicado que en el caso de los más de 100.000 ucranianos acogidos en España desde el inicio de la guerra ya son 7.000 los que están trabajando en el país y, en su mayoría mujeres. Escrivá ha puesto en valor esta cifra ya que, según ha recordado, la mayoría de los desplazados son menores y también hay un gran número de personas mayores.
Sobre la situación de estas personas, ha explicado que el número se ha estabilizado entre los 125.000 y 130.000 desplazados al país, teniendo en cuanta que algunos ya están volviendo, pero también que sigue llegando gente, según ha indicado.
LA COLABORACIÓN CON MADRID
En cuanto al trabajo con las CCAA en la acogida, ha indicado que "la colaboración es extraordinaria", aunque ha reconocido que la Comunidad de Madrid es "una excepción".
El ministro ha explicado que las políticas de acogida y refugio son estatales pero en los centros impulsados en Barcelona, Málaga y Alicante se trabaja con los ejecutivos regionales que envían allí medios sanitarios o de servicios sociales que son competencias autonómicas. Sin embargo, según ha apuntado, en el que está en Pozuelo (Madrid) no hay estos servicios porque la Comunidad de Madrid obliga para ello que los refugiados vayan al Zendal.