BERLÍN, 27 Feb. (Reuters/EP) -
El Gobierno alemán ha aprobado este miércoles una modificación de las leyes de inmigración para facilitar la incorporación al mercado laboral germano de trabajadores cualificados de países que no pertenezcan a la Unión Europea, con el objetivo de paliar la escasez de empleados en sectores como la ingeniería, la fontanería y el ferroviario.
La canciller alemana, Angela Merkel, ha aprobado las modificaciones de la legislación, que ahora deberán ser ratificadas en la Cámara Alta y que buscan poner fin a la escasez de mano de obra cualificada facilitando el reconocimiento en Alemania de sus títulos.
Estos cambios en la legislación sobre extranjería entrarán en vigor el próximo mes de julio. "Con este nuevo decreto, estamos deshaciéndonos del 40 por ciento de las normas antiguas y dejamos abierta la puerta para la mano de obra cualificada pueda ayudar al progreso de nuestro país", ha destacado la ministra de Trabajo, Ursula von del Leyen, en un comunicado.
Alemania ya había introducido el sistema de 'tarjeta azul', destinado a facilitar la contratación de titulados universitarios y que ha permitido potenciar la captación de enfermeras extranjeras. Alemania necesita ahora conductores de trenes, fontaneros y trabajadores de eliminación de residuos, según el Ministerio de Trabajo.
En contraste con la mayoría de países de la Unión Europea, en los que el desempleo ha aumentado por la crisis, la tasa de empleo en Alemania está en su nivel más alto desde la reunificación del país en 1990.
Sin embargo, la elevada edad de su población y la baja tasa de inmigración ha dado lugar a una escasez de trabajadores en ciertos sectores profesionales, en los que la libertad de movimiento de la Unión Europea no ha logrado cubrir el vacío.
El Gobierno ya ha introducido medidas para reducir la burocracia y animar a las empresas a reconocer las cualificaciones extranjeras, aunque los críticos mantienen que estas medidas son insuficientes.
La inmigración en Alemania está aumentando por tratarse de uno de los pocos países que está resistiendo a la crisis de la Unión Europea. La inmigración aumentó hasta las 340.000 personas en 2012, frente a los 128.000 inmigrantes registrados dos años antes.
Sin embargo, la Organización para Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) ha advertido de que Alemania debe liberalizar el reclutamiento de trabajadores extranjeros para afrontar la falta de 5,4 millones de empleados vocacionales o con cualificaciones terciarias que sufrirá en 2025.
Los empresarios alemanes han valorado positivamente la reforma legal impulsada por el Gobierno de Merkel. La patronal BDA ha subrayado que esta modificación "facilitará" la llegada de inmigración cualificada en sectores "no académicos" y ha recordado la escasez de empleados en los sectores de ingeniería y electrónica. La patronal ha destacado el "cambio de mentalidad" del Gobierno para que los trabajadores extranjeros cualificados sean "bienvenidos".