Guardia Civil y fuerzas marroquíes impiden la entrada de mil inmigrantes subsaharianos en Melilla

El delegado del Gobierno insiste en que es un problema de toda la Unión Europea

MADRID, 20 Nov. (EUROPA PRESS) -

La Guardia Civil, en cooperación con las fuerzas de seguridad marroquíes, han impedido esta madrugada un intento masivo de asalto a la valla de Melilla protagonizado por un millar de subsaharianos, según informa la delegación del Gobierno de la ciudad autónoma.

Los inmigrantes, en fila desde los campamentos del Monte Gurugú (Marruecos) muy próximo a Melilla, iniciaron una marcha hacia la valla fronteriza en torno a la media noche de este martes, por la zona conocida como Arroyo Villa Pilar.

Las fuerzas marroquíes dispersaron a los inmigrantes, pero un grupo se dirigió a la zona del paso fronterizo de Farhana. Sobre las 3 de la madrugada de este miércoles el grupo ya había desistido de su empeño y volvió hacia el interior de Marruecos, sin que lograran alcanzar la valla.

La delegación del Gobierno recalca que este nuevo intento "frustrado" muestra una vez más "a extrema presión migratoria sobre esta ciudad y avala la necesidad de reforzar las medidas anti-intrusión que componen su perímetro fronterizo"

Así, informa que la Guardia Civil desplegó todo su dispositivo "anti-intrusión" reforzado por un grupo de los GRS (Grupo de Reserva y Seguridad de la Benemérita) y un helicóptero dotado de infrarrojos se mantuvo alerta hasta quedar descartado cualquier indicio de nuevo intento de asalto a la valla.

UN PROBLEMA DE LA UE

Para el Delegado del Gobierno en Melilla, Abdelmalik El Barkani, este no es un problema exclusivo de Melilla y su entorno marroquí, "ni tampoco de España y Marruecos", sino "del conjunto de la Unión Europea, hacia cuyos países pretenden dirigirse la práctica totalidad de los inmigrantes irregulares que actualmente se encuentran acampados en el Monte Gurugú".

El Barkani insiste en la necesaria coordinación de las políticas migratorias de la UE, que "forzosamente debe implicarse en mayor medida en la defensa de su frontera Sur y en el control de estos flujos migratorios irregulares, víctimas de las mafias que comercian espuriamente con la vida de los seres humanos, hasta llevarlos a situaciones límites y de extremo riesgo para los propios inmigrantes y las fuerzas de seguridad encargadas de custodiar la frontera de Melilla".