MADRID, 30 Mar. (EUROPA PRESS) -
La ocupación de los Centros de Internamiento para Extranjeros (CIE) ronda el 12%, lo que supone en torno a un 80% menos que al comienzo del Estado de Alarma decretado por la crisis del nuevo coronavirus COVID-19 el pasado 14 de marzo, según han informado a Europa Press fuentes del Ministerio del Interior.
La ocupación media de estos centros está bajando desde que se declaró la alarma, ya que el Ministerio del Interior está liberando a varios de los internos bien por superar el máximo legal de estancia, o bien por la imposibilidad de retornarlos a sus países de origen. Los CIE son unas instalaciones policiales de carácter no penitenciario diseñadas para poder ejecutar la expulsión del territorio nacional.
Hace cinco días, el 25 de marzo, la ocupación media de estos centros se situaba en el 25,2%, es decir, el doble que actualmente, que ronda el 12%. Asimismo, dos de los siete CIE que operan en España ya están vacíos.
Si bien fuentes de Interior facilitan la ocupación media, no precisan cuál es el número de internos con el que se corresponde dicho porcentaje. Tampoco dan el número total de plazas existentes en toda la red de CIE.
Desde el departamento que dirige Fernando Grande-Marlaska afirman que actualmente, a raíz de las liberaciones de internos durante el Estado de Alarma, están vacíos los CIE de Barcelona y el de Tarifa (Cádiz). Además de estos dos, hay otros cinco centros de este tipo operando en todo el territorio español: en Aluche (Madrid); en Las Palmas; en Tenerife; en Murcia y en Valencia.
El máximo legal de estancia en estas instalaciones es de 60 días y, según aseguró el director adjunto operativo de la Policía Nacional, José Ángel González, toda persona interna que superase este periodo legal durante el Estado de Alarma sería puesta en libertad, en cumplimiento a la ley.
LIBERACIÓN DE INTERNOS POR LA IMPOSIBILIDAD DE SER EXPULSADOS
Para poder frenar la expansión de la pandemia, varios países están imponiendo restricciones a la llegada de personas procedentes de España.
En esta línea, el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha asegurado este lunes en rueda de prensa que las repatriaciones de personas migrantes en situación administrativa irregular en España "estás suspendidas" por "una imposibilidad manifiesta" de retorno. En concreto, ha apuntado que los países de origen de la mayoría de estas personas tienen sus fronteras cerradas "para sus propios ciudadanos" ante la crisis del Covid-19.
Ya al comienzo de la crisis sanitaria, varios colectivos sociales así como el Defensor del Pueblo pidieron la liberación de todos los internos porque las circunstancias actuales "impiden" que se pueda materializar la devolución o expulsión de los migrantes a sus países de origen.
Tras esto, el Ministerio del Interior abrió la puerta a liberar a los internos tras analizar "caso a caso" las posibilidades de retorno de cada uno de ellos. A los liberados que tienen domicilio en España se les está facilitando su regreso a sus residencias, mientras que a otros que no tienen alternativa habitacional se les está trasladando al dispositivo de acogida del sistema de Atención Humanitaria.
Fuentes del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, confirmaron a Europa Press que ya están recibiendo a internos procedentes de los CIE de Barcelona, Madrid y Valencia, si bien no han ofrecido el número concreto de personas acogidas desde CIE por el momento.
CERCA DE 60 INTERNOS EN ALUCHE "PODRÍAN VOLVER A SU RESIDENCIA"
Ante estas liberaciones, el Servicio Jesuita a Migrantes (SJM) ha expresado su preocupación ante "la descoordinación y la puesta en libertad" desde algunos CIE "sin las garantías necesarias" para los internos.
Pueblos Unidos, entidad del SJM, publicó en Twitter que los CIE "van liberando internos", pero en el de Aluche "hay cerca de 60 personas, al menos 10 latinoamericanos" que "podrían acudir a su propio domicilio, un contexto más adecuado" ante la crisis del coronavirus.
De acuerdo a un informe del SJM sobre los CIE, en 2018 dos tercios de las personas internadas procedían de Marruecos (36%) y de Argelia (32%). Ese año fueron internadas 7.855 personas en los CIE: 7.676 varones y 179 mujeres.
Un año antes, en 2017, un total de 8.837 migrantes pasaron por alguno de los siete Centros de Internamiento de Extranjeros (CIE). Sin embargo, fueron 3.041 las personas finalmente enviadas a sus países de origen, mientras que 5.796 personas (el 65,5%) recluidas en los CIE tuvieron que ser puestas en libertad ante la imposibilidad de ejecutar la orden de expulsión.
Así se reflejó en datos oficiales recopilados en una respuesta parlamentaria a la exsenadora de Unidos Podemos Maribel Mora, unas cifras que constataban que el Ministerio del Interior, responsable de la gestión de los centros, logró deportar a su país de origen únicamente al 34,5% de los internos.