Actualizado 20/05/2011 15:31

15M.- Los sindicatos policiales advierten de que desalojar Sol sería "un enorme error" y generaría "un problema mayor"

MADRID 20 May. (EUROPA PRESS) -

Los dos principales sindicatos policiales SUP y CEP ha coincidido hoy en manifestarse en contra de desalojar la Puerta del Sol a pesar de la decisión de la Junta Electoral Central. Creen que sería un "enorme error" que, a su juicio, generaría "un problema mayor" al tiempo recuerdan el carácter "pacífico" de las movilizaciones que no piden el voto para ningún partido.

"El SUP respeta la decisión de la Junta Electoral Central, ahora bien, si nos piden opinión pensamos que no se debería disolver nunca la plaza de manera violenta. No somos partidarios de usar la violencia para disolver concentraciones pacíficas que no piden el voto para nadie", ha dicho en declaraciones a Europa Press el secretario general del Sindicato Unificado de la Policía (SUP), José Manuel Sánchez Fornet.

En ese sentido, desde el sindicato opinan que "hay que tener en cuenta la situación de los cinco millones de parados". "Es la expresión popular de un sentimiento generalizado y hay que ser muy prudentes, mientras no cometan ninguna ilegalidad nuestra opinión es que, a pesar de la Junta, no se debería disolver, sería generar un problema mayor", ha añadido.

"Sería un tremendo error, un absoluto error que la Policía desalojase la plaza y estoy seguro de que los responsables policiales ya lo han comunicado al ministro", ha dicho por su parte el vicesecretario de la Confederación Española de la Policía (CEP), Lorenzo Nebrera.

A su entender "lo más prudente es lo que se está haciendo controlar a las personas que entran y proceder contra estas personas que están en esta concentración pero nunca intervenir creo que la decisiones son coherentes". "No es un problema policial sino social", ha añadido Nebrera al tiempo que ha advertido del riesgo que podría genera un desalojo por muy bien que se haga. Por muchos efectivos que se movilicen va a haber incidente siempre y va a pasar de ser un problema social a ser un problema policial.