WASHINGTON, 9 Abr. (Reuters/EP) -
El mundo está en vías de reducir la extrema pobreza a la mitad para el 2015, pero África se mantendrá lejos de cumplir con los Objetivos de Desarrollo del Milenio de Naciones Unidas, según vaticinan el Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional (FMI).
El nuevo informe de las instituciones mundiales también advirtió de que son necesarias acciones urgentes para luchar contra el cambio climático, el cual amenaza con afectar particularmente a los países pobres y con revertir el progreso del combate a la pobreza.
El Informe de Monitoreo de 2008, divulgado antes de las reuniones del FMI y el Banco Mundial que se realizarán este fin de semana en Washington, explicó que el fuerte crecimiento económico en gran parte del mundo en desarrollo había contribuido a disminuir la pobreza en el globo. También destacó que el número de personas en extrema pobreza -que viven con menos de un dólar al día- descendió en 278 millones entre 1990 y el 2004, y en 150 millones en los últimos cinco años de ese período.
En el mundo todavía viven cerca de 1.000 millones de personas en extrema pobreza, añadió el documento. Las mayores reducciones en índices de pobreza se registraron en regiones con un crecimiento más fuerte, particularmente en el este de Asia, incluyendo a los poderosos centros emergentes China e India, según los organismos.
Aún así, el avance de Africa en la disminución de los índices de pobreza ha sido irregular, incluso con 18 países de esa región con un fuerte crecimiento económico de cerca de un 5,5 por ciento durante la última década. Sin embargo, otros 20 países africanos, muchos de los cuales están afectados por conflictos, permanecieron estancados con un bajo crecimiento, de alrededor de un 2 por ciento anual.
El informe resaltó que aunque se ha logrado algo de progreso en el cumplimiento de las ocho metas acordadas en los objetivos de desarrollo para 2015, las perspectivas son débiles en cuando a la reducción de la mortalidad infantil y maternal, con serios déficit además en educación primaria, nutrición y sanidad.
El presidente del Banco Mundial, Robert Zoellick, dijo que estaba personalmente preocupado por las deficiencias en la lucha contra el hambre y la desnutrición, que para él son las "olvidadas" dentro de los objetivos de desarrollo del milenio. Los altos precios mundiales de los alimentos y de la energía han causado que haya una atención mayor sobre esos temas, pero es necesario hacer más, especialmente considerando que los altos precios podrían permanecer varios años.