MADRID 12 Jun. (EUROPA PRESS) -
La Asociación de Directores y Gerentes de Servicios Sociales pide a las comunidades autónomas que abran los comedores escolares durante el verano para paliar los efectos del empobrecimiento de las familias sobre los más pequeños.
En la presentación del Índice de Derechos, Economía y Cobertura (DEC), que analiza el desarrollo de los servicios sociales en España, el coordinador del trabajo, Luis Barriga, ha incidido en la importancia de abrir los comedores para no estigmatizar a los niños que los necesitan.
"El comedor escolar es la respuesta más normalizada", ha destacado, para incidir en que "las personas tienen dignidad y a nadie le gusta decir que es pobre", cuando menos a los niños sentirse desplazados por esta razón.
Por eso, sostiene que en lugar de abrir "comedores para pobres" se deben "reforzar" y habilitar los de los colegios porque los otros, "aunque se abran con presupuesto de servicios sociales", no son deseables. "Cada vez que la administración pública manda a un ciudadano a la beneficencia, es un fracaso", ha añadido el director de la asociación, Juan Manuel Ramírez.
El informe presentado, que dibuja un sistema "débil, estancado y con perspectiva negativa", alerta, como ya hiciera en la edición anterior sobre los riesgos de reducir las becas de comedor, del peligro de que los recortes o los cambios competenciales acaben con los servicios sociales.
El coautor del trabajo, Gustavo García, ha dicho en este sentido que si bien "no pueden acabar con la pobreza", que sobreviene por otras causas, los servicios sociales "sí pueden frenarla y evitar que se convierta en exclusión". Por eso, recortar en tiempos de crisis como se está haciendo, --cerca de 500 millones de euros en 4 años, según el informe--, es a su juicio, "como ponerse a despedir médicos en una pandemia".
Por otra parte, la organización ha anunciado que presentará una queja ante la Oficina del Defensor del Pueblo por la falta de transparencia de las administraciones públicas, que, según denuncian, no ofrecen datos actualizados del sector, lo que significa que se está "planificando a ciegas" la respuesta de los servicios sociales a la crisis.