Actualizado 03/10/2008 22:02

Feministas piden a Bruselas que amplíe también el permiso por paternidad para no perjudicar a la mujer en el empleo

MADRID, 3 Oct. (EUROPA PRESS) -

Asociaciones feministas manifestaron hoy sus reservas frente a la propuesta de Bruselas para ampliar el permiso mínimo por maternidad desde las 14 hasta las 18 semanas ya que, si bien consideran que la medida es positiva al "amplíar derechos", temen que acabe perjudicando a la contratación de mujeres y piden por ello ventajas similares también para los padres.

En declaraciones a Europa Press, la presidenta de Mujeres Progresistas, Yolanda Besteiro, explicó que si la ampliación a 18 semanas para las madres "no va unida a permisos de paternidad, puede acabar perjudicándolas, porque hace que sea poco atractivo para el empresario su contratación".

Según afirmó, el problema es que esta medida no tiene en cuenta que "el cuidado de los hijos no es sólo obligación de la madre, sino de ambos progenitores". "Una vez más se olvidan de la corresponsabilidad y de la implicación de los padres en el cuidado de los hijos", lamentó Besteiro, para quien esta perspectiva contribuye poco a la igualdad real.

En esta línea se pronunció la portavoz de la asociación Themis, Altamira Gonzalo, para quien el camino a la corresponsabilidad implica "un permiso obligatorio por paternidad, ya que en estos momentos en los que aún no se ha alcanzado la igualdad de mujeres y hombres en el mundo laboral, estas medidas de ampliación pueden volverse contra la mujer y tener efectos perversos sobre su acceso y promoción en la vida laboral".

"Mientras no avancemos en esa igualdad, y la única manera de hacerlo es que los hombres se incorporen al cuidado de los hijos y los familiares dependientes, las medidas que propone la UE se van a volver contra las propias mujeres, porque un empresario no ve más allá de las 16 semanas", sentenció, en declaraciones a Europa Press.

Por su parte, la responsable de Fundación Mujeres, Marisa Soleto, incidió en que "cualquier medida encaminada a facilitar herramientas para combinar la maternidad con la actividad pública es positiva" aunque matizó que lo más efectivo para impulsar una conciliación "real y efectiva" sería "no ya tanto el reconocimiento de las mujeres como en el de los hombres".

A juicio de Soleto, "además de ampliar todo lo que se pueda el permiso de maternidad, es imprescindible regular los derechos y permisos de paternidad para que la conciliación sea efectiva y no provoque un efecto perverso sobre la mujer".