MADRID, 25 May. (EUROPA PRESS) -
La Fundación Strathmore Educational Trust, que pretende "facilitar a los jóvenes el acceso al trabajo", ha inaugurado en un suburbio muy poblado de Nairobi (Kenia) un centro de Formación Profesional, el Eastlands College of Technology, para 800 jóvenes.
El directivo de la Fundación Andrés Olea ha explicado que "la inauguración de esta sede, tras doce años en una provisional, ha sido posible gracias a ayudas locales y de países como España y Bélgica".
El proyecto incluirá un segundo edificio y otras instalaciones ahora en construcción que esperan concluir en 2017. El profesional español promueve instituciones educativas en Kenia desde 1980, que cuentan con la atención espiritual de la Prelatura del Opus Dei, presente en el continente desde 1958.
Según ha recordado Olea, la mitad de los 40 millones de la población de Kenia es menor de 25 años y entre los jóvenes hay un paro del 80%.
"Es evidente la necesidad de cualificar a los jóvenes, de forma que puedan tener acceso a puestos de trabajo que requieren conocimientos técnicos", ha precisado, al tiempo que ha añadido que apuestan por dar a los chicos los conocimientos necesarios para crear su propia microempresa.
Olea, que se encuentra en España para buscar fondos, ha revelado que su sueño es contribuir a la formación profesional, técnica y humana de los jóvenes que llenan las calles y suburbios de Nairobi, como este de Eastlands, con un millón de habitantes y que tiene "barrios gigantes con una alta población infantil y juvenil".
Según los estudios que maneja la Fundación Strathmore Educational Trust, en Kenia la mayoría del empleo está en el sector informal, o no regulado, de la economía, que experimenta en estos años un gran crecimiento.
Al mismo tiempo, según explica el directivo, "el Gobierno keniano está promoviendo la industrialización del país, y uno de los obstáculos es la falta de mano de obra capacitada para trabajar en la industria moderna".
En este sentido, ha apuntado que "el Eastlands College of Technology (ECT) intenta paliar el problema de muchos alumnos que salen de los centros de formación profesional sin una educación que sea relevante para la industria" y lo hace dando importancia a "la calidad y la excelencia".
Asimismo, la identidad del centro tiene en cuenta los principios de la doctrina social de la Iglesia, que "resultan muy útiles para intentar formar ciudadanos con responsabilidad social y ética personal", según señala Olea.