Actualizado 05/11/2008 20:26

España es un país muy religioso, aunque la religión juega un papel subordinado en lo cotidiano, según un estudio

MADRID 5 Nov. (EUROPA PRESS) -

España sigue siendo un país muy religioso, aunque esta dimensión juega un papel subordinado en lo cotidiano, según se desprende del estudio internacional comparativo que ha realizado la Fundación Bertelsmann Stiftung y que presentó hoy en Madrid.

De las encuestas realizadas se desprende que España "continúa destacando por su impronta religiosa", ya que cuatro de cada cinco (79 por ciento) de los españoles son religiosos, considerándose "muy religiosos" el 27 por ciento. En cambio, la proporción de personas no religiosas llega al 19 por ciento.

En concreto, las que más apoyo brindan a la religión son las mujeres y las personas mayores. Según el informe, una de cada tres mujeres es muy religiosa (34 por ciento); mientras que en el caso de los hombres el dato se queda en el 20 por ciento. Entre las personas mayores de 60 años, una de cada dos es muy religiosa (49 por ciento).

La proporción de personas religiosas menores de 30 años alcanza sólo el 11 por ciento, aunque el 92 por ciento de los jóvenes haya sido educado en un ambiente religioso. Dentro de este grupo también se sitúan la mayor parte de personas que ya no pertenecen a una comunidad religiosa, el 24 por ciento.

A pesar de los datos, el informe considera que si bien la religión está presente en la sociedad, "muchos de los españoles sólo la perciben de forma inconsciente en su vida cotidiana, o apenas la perciben, como si fuera una música de fondo".

Así, en el ejercicio público de la religión, España "está prácticamente dividida" en tres partes: el 34 por ciento va a la iglesia regularmente, el 31 por ciento va de forma irregular y el 34 por ciento restante ya no asiste o lo hace con muy poca frecuencia.

En lo que se refiere a la práctica de la oración, las encuestas arrojan una distribución similar a la asistencia a la Eucaristía. Así las cosas, aproximadamente uno de cada tres españoles afirman que oran con regularidad, mientas que el 37 por ciento no lo hacen nunca. Por otra parte, un 15 por ciento considera demostrar un gran interés por temas religiosos, si bien un 42 por ciento no se interesa por ellos.

Asimismo, cerca del 36 por ciento de los encuestados creen en la existencia de Dios o algo divino, en el 27 por ciento se mezclan la fe y las dudas al contestar esta pregunta y el 22 por ciento no cree en nada.

Con todo, el profesor de sociología de la religión de la Universidad de Georgetown, José Casanova, mantiene que "el proceso de secularización de los últimos años ha disminuido su velocidad". "Hay muy pocos indicios de que los españoles tengan mucho interés en la religión y reflexionen mucho sobre ella", apunta.

Por su parte, el director del Programa de Orientaciones Culturales de la Berstelman Stifstung, señala que la religiosidad "está presente en todos las edades en España". "Sin embargo --añade--, la intensidad es mucho menor entre los jóvenes españoles que en el grupo de los mayores de 60".