Según la medición efectuada el pasado año, la huella de carbono del Zinemaldia se sitúa en 4.147 toneladas de CO2Eq
SAN SEBASTIÁN, 12 Sep. (EUROPA PRESS) -
El Festival de San Sebastián ha sumado en su 71 edición a Repsol, como patrocinador en sostenibilidad, colaborando con sus soluciones para descarbonizar el evento, y a Renfe como colaborador, en el marco de su plan para ser un evento carbono neutral en cinco años.
El director del Festival de San Sebastián, José Luis Rebordinos, y la coordinadora del proyecto de Sostenibilidad del Festival, Amaia Serrulla, junto a Siridia Berenguer, directora de Desarrollo y Nuevos Negocios de Repsol, y Verónica Portell Torres, delegada de Comunicación, Marca y Publicidad de Renfe en País Vasco, Navarra y Cantabria, han presentado en rueda de prensa los detalles del plan.
Según la medición efectuada el pasado año, la huella de carbono del Festival se sitúa en 4.147 toneladas de CO2Eq. Aunque no es posible determinar el porcentaje exacto de reducción de la huella porque son estimaciones, la consultora CREAST sostiene que medidas como la disminución de los materiales de un solo uso, el apagado temprano del Kursaal, el uso de iluminación de tecnología LED o la eliminación casi completa de la impresión en papel han logrado una considerable reducción de la huella.
En esta 71 edición, Repsol suministrará distintas soluciones para que el transporte sea sostenible y alimentará con electricidad renovable el certamen. Para el transporte, se han escogido los combustibles renovables 100% que Repsol "fabrica a partir de distintos residuos como, por ejemplo, el aceite de cocina usado", ha explicado Berenguer.
Además, la compañía energética pondrá a disposición de la flota de vehículos eléctricos e híbridos enchufables del Festival toda su red de recarga pública de San Sebastián, con siete puntos instalados y operativos, y habilitará dos puntos adicionales portátiles en el Paseo de la República Argentina.
Asimismo, proporcionará dos grupos electrógenos que funcionan con combustible renovable 100% y que cubrirán las necesidades energéticas de la fiesta de clausura. Por último, Repsol instalará una solución de generación de energía solar portátil que ofrecerá electricidad renovable a los cubos publicitarios que suelen ubicarse en la Plaza Okendo y a las personas que quieran recargar su móvil. Por su parte, Renfe ayudará al Zinemaldia a promover una movilidad más sostenible.
En el plano interno, el Festival de San Sebastián continuará trabajando para afianzar las medidas puestas en marcha en los últimos años. Así, en la presente edición se han incluido variables de sostenibilidad en diferentes pliegos de contratación, en especial en los relacionados con actividades que incluyen algún tipo de catering.
En esa línea, volverá a compensar sus emisiones como hizo por primera vez en la pasada edición, cuando destinó 25.000 euros a través del Fondo de Carbono Voluntario de Gipuzkoa puesto en marcha por la Fundación Naturklima y el departamento de Medio Ambiente de la Diputación Foral de Gipuzkoa. Dicha aportación se invirtió en proyectos de mejora de infraestructuras verdes locales para ayudar a regenerar la funcionalidad de los sumideros de carbono naturales de Gipuzkoa, principalmente bosques y mares.
RESULTADOS DE 2022
El año pasado, el proceso de medición de la huella de carbono del Festival donostiarra comenzó en junio y finalizó en diciembre. Tras examinar el mapa de proveedores, las sedes del certamen y los alojamientos, la flota de vehículos, los sponsors, el catering, los materiales y los residuos, CREAST determinó que la huella del Festival es de 4.147 toneladas de CO2Eq. Las principales fuentes de emisiones son la movilidad (40%), el alojamiento (37%) y el uso de materiales (19%), seguidos del catering (2%), el consumo eléctrico (1%) y los residuos (0,2%).
Entre los puntos clave para reducir la huella de carbono derivada de la movilidad, la consultora propone utilizar energías más sostenibles como los combustibles renovables e incrementar progresivamente la flota de vehículos eléctricos o híbridos. Además, también se recomienda el uso de bicicletas para la movilidad local, así como asistir al Festival en vehículos compartidos.
En lo referido a los viajes de las personas invitadas y de los realizados por los miembros de la institución durante el año, se propone igualmente dar prioridad a energías más sostenibles para el transporte, como el uso de combustibles renovables y SAF (sustainable aviation fuel, por sus siglas en inglés) en aviación o el uso del tren y al coche compartido siempre que sea posible.
En el apartado de materiales, se considera esencial continuar reduciendo el consumo de papel. Así, en 2022 el catálogo del Festival dejó de imprimirse para existir sólo en su versión digital, lo que permitió reducir 3.584.99 kilos de CO2Eq. Además, sólo se publicaron 6.000 ejemplares de la guía Película a Película, lo que ayudó a reducir 653 kilos de CO2Eq. Por primera vez este año, la guía estará impresa en papel 100% reciclado. También es necesario reducir el uso de plásticos en compras, envoltorios y envases.
En lo referido al catering, se recomienda abundar en una política que garantice la adquisición de productos 100% kilómetro 0, así como utilizar vajillas y cuberterías reutilizables o biodegradables y garantizar la eficiencia energética en el proceso de elaboración de las comidas ofrecidas en el marco del Festival.
El pasado año la iluminación exterior del Kursaal pasó a apagarse a las 2.15 horas en lugar de a las 4.30 horas, con lo que se logra reducir aproximadamente en un 46,7% el consumo energético. Además, el Festival continuará su transición a tecnología LED para iluminar sus sedes y oficinas porque ello permite reducir el consumo en un 75% con respecto a la iluminación tradicional, y seguirá trabajando para disminuir el consumo de energía y que ésta proceda de fuentes 100% renovables.