Grupo Hefame, EGA Master y Fundación Orange, premiados por Fundación Mahou San Miguel por impulsar el empleo juvenil

MADRID, 26 Oct. (EUROPA PRESS) -

La Fundación Mahou San Miguel ha dado a conocer a los ganadores de los IV Premios al Impulso del Empleo Juvenil, que organiza en colaboración con el Club de Excelencia en Sostenibilidad y cuyo Comité de Honor está presidido por los Reyes de España. Entre los ganadores de este año se encuentran Grupo Hefame, EGA Master y Fundación Orange.

Estos galardones reconocen la labor que empresas y entidades sociales realizan en favor del empleo juvenil a través de iniciativas capaces de ofrecer oportunidades laborales, destacando especialmente aquellas orientadas a colectivos con más dificultades, además de sensibilizar tanto al tejido empresarial como a la sociedad en general sobre la necesidad de impulsar este tipo de prácticas para mejorar la empleabilidad y la competitividad, promoviendo el acercamiento entre el mundo empresarial y la educación, como señalan sus impulsores.

De este modo, en la categoría de Premio Gran Empresa se ha reconocido al Grupo Hefame por la Escuela Logística (ELO), un programa que ofrece formación gratuita a personas desempleadas y en situación vulnerable que capacita a los participantes para desempeñar funciones logísticas en entornos automatizados y robotizados donde la interacción con las nuevas tecnologías es clave. Desde su inicio, hace siete años, ha contado con 340 participantes y cerca del 80% ha tenido la oportunidad de incorporarse a trabajar en el propio Grupo.

Mientras, el Premio Pyme ha sido para EGA Master por su compromiso con los jóvenes. Este fabricante de herramientas industriales trabaja en un proyecto basado en las personas y el talento joven como principal capital y activo de la organización. Además, impulsa el desarrollo profesional de todos los colectivos que forman parte de ella.

El Premio Tercer Sector Gran Entidad Social ha recaido en la Fundación Orange por su programa 'GarageLab', una iniciativa que ayuda a combatir el absentismo escolar y reducir la tasa de abandono escolar a través de un espacio de creación conjunta en el que el principal protagonista es el alumnado.

El Premio Tercer Sector Pequeña Entidad Social (que, como novedad este año, cuenta con una dotación especial de 10.000 euros) ha sido para La Rueca Asociación por la Escuela de Cocina Tierra, un proyecto que capacita a los jóvenes en la mejora de sus habilidades básicas, transversales y digitales con el acompañamiento individual de cada participante a través del mentoring.

La Mención especial Tercer Sector Gran Entidad ha sido para SOLTRA por su iniciativa Potenciando Capacidades. El objetivo de esta entidad, de iniciativa social, calificada sin ánimo de lucro, es lograr la inclusión laboral de personas con diferentes capacidades a través de la generación de empleo de calidad.

En la ceremonia de entrega, el presidente de Fundación Mahou San Miguel, Alfredo Mahou, ha resaltado que "esta edición de los premios ha sido muy especial para nosotros porque volvemos a reencontrarnos para celebrar el esfuerzo de muchas empresas y entidades que han seguido trabajando para generar oportunidades. Organizaciones valientes que ayudan al progreso de los jóvenes, detectando nuevas necesidades y ofreciendo respuestas innovadoras y constructivas".

"Vivimos tiempos extraordinarios, en los que todos tenemos que aceptar, entender y abrazar el cambio acelerado que estamos viviendo. Colectivamente, necesitamos más que nunca el talento y la energía de los más jóvenes. Por ello es importante destacar y agradecer el esfuerzo de los colectivos que les apoyan", ha destacado por su parte la divulgadora Elsa Punset en la ponencia 'Propuestas para estos tiempos Extraordinarios'.

En las cuatro ediciones celebradas desde su inicio, el Premio al Impulso del Empleo Juvenil ha recibido más de 230 iniciativas de toda España para la creación de empleo. Para conceder los premios, el jurado ha tenido en cuenta tanto el impacto de los proyectos como el valor que aportan en la creación de empleo estable y de calidad, sobre todo cuando van dirigidos a colectivos de jóvenes con dificultades; su consistencia y permanencia en el tiempo; la replicabilidad del modelo en otros ámbitos o regiones; su carácter innovador y su alcance, además de tener en cuenta el concepto de sostenibilidad en su triple vertiente: económica, ambiental y social.