Actualizado 30/10/2009 18:55

La Infanta Cristina pide a las empresas que no sean ajenas a la mortalidad infantil en los países en desarrollo

La Infanta participa en Pamplona en una mesa redonda en el VI Congreso de Directivos CEDE

PAMPLONA, 30 Oct. (EUROPA PRESS) -

La Infanta Cristina defendió hoy que el mundo empresarial "no debe estar ajeno" a los problemas del tercer mundo y a la mortalidad infantil en países en vías de desarrollo y aseguró que "todavía hay mucho trabajo por hacer" para "solucionar un problema de tan grave dimensión".

La Infanta Cristina participó hoy, como directora del Área Social de la Fundación 'La Caixa', en una mesa redonda sobre la Responsabilidad Social Empresarial (RSE) y la gestión directiva celebrada en el marco del VI Congreso de Directivos CEDE que se celebra desde ayer en el Baluarte de Pamplona y que ha reunido a lo largo de estos dos días a más de 1.000 directivos de todo el país.

Tras visionar un vídeo sobre el programa de cooperación internacional de la Obra Social La Caixa, la Infanta mostró su satisfacción por participar en esta mesa redonda en la que compartió "iniciativas puestas en marcha por La Caixa dirigidas a todas las empresas que quieran llevar a cabo políticas de responsabilidad social".

Según explicó, la entidad "lleva años" poniendo en marcha diversas iniciativas para ayudar a los países en vías de desarrollo, y destacó la creación de la alianza empresarial en España a favor de la vacunación infantil que tiene como objetivo, señaló, "facilitar a las empresas españolas la posibilidad de colaborar con los países del tercer mundo".

La directora del Área Social de la Fundación apuntó que toda clase de empresas tienen la posibilidad de colaborar con esta iniciativa, ya que, según expuso, la aportación mínima que pueden hacer a este proyecto para facilitar el acceso a las vacunas de todos los niños es de 1.000 euros. La Infanta resaltó que desde el año 2000 se ha conseguido vacunar, gracias a GAVI, a más de 2,13 millones de niños de países en vías de desarrollo, con lo que se han evitado "3,5 millones de muertes".

Durante su intervención, la Infanta Cristina defendió que las empresas "pueden ayudar a desarrollar un modelo eficaz capaz de salvar millones de vidas en los países más desfavorecidos". "Nuestra colaboración es necesaria e importante en un momento de crisis como la actual y ante una sociedad cada vez más vulnerable", agregó.

DEFENSA DE LA RSE

Por su parte, el director del Instituto de Innovación Social de Esade, Ignasi Carreras, que también participo en esta sesión plenaria, se refirió al liderazgo como un elemento "fundamental" para la Responsabilidad Social Empresarial, que según definió, es "un reto de liderazgo de líderes que sepan construir y desarrollar empresas capaces de crear más valor económico de forma compatible con los derechos fundamentales y el medio ambiente".

Carreras puso de relieve que las empresas que apuestan por la RSE "aguantan el tipo durante la crisis con entereza", aunque lamentó que "le afectan igual los recortes presupuestarios" que al resto de las empresas. Aún así, hizo hincapié en la idea de que la Responsabilidad Social Empresarial es la "mejor opción" para las empresas en tiempos de crisis económica, ya que, "aquellas empresas que apuestan por la responsabilidad empresarial tienen mejor reputación, mejor precio de marca y más reconocimiento".

"Que confíen en ti en época de crisis es un activo fundamental para salir de la misma y para apostar por un futuro más competitivo", aseguró Ignasi Carreras, quien destacó que la RSE "se ha visto hasta ahora como un gasto aunque también es una inversión para contribuir a un mundo más justo y más adecuado, donde todo el mundo pueda vivir plenamente".

Según manifestó, la RSE "refuerza políticas de recursos humanos y el sentido de pertenencia de los trabajadores con la empresa" y afirmó que "también es una aliada de la innovación" porque "permite desarrollar nuevos productos y mercados que responden a las nuevas demandas e inquietudes de los consumidores".

MÁS INTERVENCIONES

Por su parte, el profesor del IESE, Santiago Álvarez de Mon, defendió la necesidad de atravesar tiempos de crisis, ya que, a su juicio, "sin ese contratiempo y tropiezo" y si "siguiésemos acumulando aciertos" el "nivel de soberbia sería insoportable". En opinión del experto, la Responsabilidad Social Empresarial "es un deber y un derecho de la sociedad" y señaló que "si el liderazgo es transformar la realidad el primer deber de un líder es estar en contacto con ella".

En esta línea, añadió que no se puede someter a la RSE "al devenir de las crisis coyunturales" y animó a los congregados así como a las personas emprendedoras a apostar por la RSE para "mejorar el mundo para toda la sociedad" y diseñar "un mejor futuro para los jóvenes".

La presidenta de Forética, Alicia Granados, también participó en esta mesa redonda en la que señaló que la Responsabilidad Social Empresarial debe ser "voluntaria y un compromiso" que "busque mitigar los impactos negativos en la sociedad y en el medio ambiente". "La RSE se debe gestionar con liderazgo, diálogo, gestión y comunicación", agregó.

Según dijo, la RSE "nunca ha sido tan importante para una compañía como ahora" y manifestó que "no solamente es importante ser responsable, sino saber cómo serlo". "Siempre he oído decir que sólo sobreviven los fuertes, pero en esta crisis a mí me gustaría creer que esta vez lo harán los más inteligentes", concluyó.