MADRID 16 Feb. (EUROPA PRESS) -
Más de 150 personas mayores residentes de los doce centros residenciales de Ballesol en Madrid reciclan objetos para ayudar a la Fundación Aladina en la lucha contra el cáncer infantil, ha informado la organización en un comunicado.
Lo que hacen es convertir artistas para elaborar collares, pendientes, broches o muñecas reutilizando cápsulas de Nespresso, latas de refresco, fregonas, papel y cartón.
Lo recaudado por los residentes en los mercadillos solidarios irá destinado a las terapias lúdicas para "cuidar el espíritu y el estado anímico de los niños enfermos de cáncer de la Fundación Aladina".
Todo lo recaudado en esta iniciativa solidaria, hasta 14.000 euros, irá destinado a mejorar la calidad de vida de los niños enfermos de cáncer de la Fundación Aladina y, en concreto "al programa de voluntariado, terapias lúdicas y apoyo psicológico, que la fundación tiene en marcha en varios hospitales públicos de la Comunidad de Madrid".
Con esta iniciativa intergeneracional entre los residentes de Ballesol y los niños y adolescentes enfermos de cáncer también se va a conseguir mejorar los espacios de ocio y descanso en estos hospitales, con el deseo de que las estancias sean menos duras y monótonas.