MADRID, 25 Nov. (EUROPA PRESS) -
ORPEA ha hecho un llamamiento a la concienciación sobre los casos de violencia de género en mayores y alerta de que las mujeres mayores recurren en menor medida a los servicios de ayuda, con motivo de la celebración, este 25 de noviembre, del Día Internacional de la Violencia contra la Mujer.
Desde 1999 hasta 2020 han sido asesinadas en España 164 mujeres de más de 60 o 65 años según el Instituto de las Mujeres, dependiente del Ministerio de Igualdad. En la misma línea, la última macroencuesta de Violencia contra la Mujer del Ministerio de Igualdad refleja que el 42,1% de las mujeres de 65 o más años que han sufrido violencia física, sexual o emocional a lo largo de sus vidas, según señala el grupo de residencias de mayores y atención a la dependencia.
La directora de Relaciones Institucionales de ORPEA Ibérica, Cristina Cantero, alerta de que el colectivo de mujeres mayores es especialmente vulnerable a la violencia de género por esta falta de visibilidad del problema, y apunta que, en muchas casos, las residencias pueden desempeñar un papel como cortafuegos.
"Las mujeres mayores sufren una doble discriminación. A la propia violencia machista se le añade el edadismo, la discriminación en base a su edad, por la cual la sociedad aún mantiene estereotipos negativos hacia las personas mayores, los cuales imponen barreras a estas mujeres para denunciar el maltrato y a las instituciones para detectarlo. La falta de una alternativa habitacional lejos del agresor es otro de los principales escollos que tienen las mayores. Las residencias de mayores pueden jugar un papel importante en la lucha contra el maltrato", precisa.
Por todo ello, desde ORPEA llaman a una mayor concienciación poblacional sobre los casos de violencia de género en mayores ya que "las mujeres mayores víctimas de violencia recurren en menor medida a servicios de ayuda psicológica, social o legal, según el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS)". "Son casos menos denunciados por las víctimas", concluye Cantero.
Desde ORPEA añaden que los profesionales que atienden a las mujeres mayores deben tener una formación específica que les dote de herramientas para poder detectar y prevenir situaciones de maltrato en personas mayores y subraya que los centros de mayores de la compañía cuentan con profesionales capacitados para intervenir y atender necesidades específicas, además de contar con programas de empleo en sus centros para mujeres maltratadas o en riesgo de violencia de género de cualquier edad.