MADRID, 9 Ene. (EUROPA PRESS) -
El AXA Research Fund, el fondo para la investigación de AXA, ha publicado recientemente la Guía 'Biodiversidad en riesgo', que cuantifica por primera vez el impacto monetario que supondría para la economía mundial una pérdida significante de la biodiversidad: entre 125 y 140 billones de dólares al año, según las estimaciones actuales, lo que equivale a más de una vez y media el PIB mundial.
El estudio añade que los más expuestos a estos costes serán las poblaciones de bajos ingresos, que dependen en mayor medida de los recursos naturales para sus ingresos y medios de subsistencia.
"La pérdida de biodiversidad tendrá un alto coste para nuestras economías: la pérdida de hábitat, la contaminación, el aumento de plagas y otras especies invasoras afectarán a sectores que van desde la agricultura, la pesca y la forestación hasta el desarrollo inmobiliario, el turismo y la salud pública", destaca el documento, que analiza la relación de la biodiversidad con el cambio climático, la seguridad y la economía, entre otros aspectos.
"La pérdida de biodiversidad exige más investigación y compromiso por parte de todos para adaptar nuestras sociedades y economías hacia modelos sostenibles desde el punto de vista medioambiental y económico", ha añadido el director general de Fundación AXA, Josep Alfonso. "Documentos como este demuestran la trascendencia de lo que está ocurriendo en el medio ambiente", apostilla.
La biodiversidad es el conjunto de animales y plantas que produce oxígeno, regula el agua, retiene el suelo y proporciona protección contra las inundaciones, entre otros servicios vitales de considerable valor y de los que depende la vida. Las investigaciones recientes han arrojado luz sobre la gravedad de la pérdida de biodiversidad, con un millón de especies de animales, plantas e insectos en peligro de extinción (IPBES, 2019).
El estudio alerta de que las consecuencias de estas extinciones podrán ser catastróficas ya que, si bien es cierto que la biodiversidad proporciona el capital natural que está impulsando el crecimiento económico, este crecimiento lleva aparejado, en ocasiones, daños ambientales que están socavando la sostenibilidad del modelo económico y están poniendo en tela de juicio las medidas tradicionales de riqueza y desarrollo, como el Producto Interior Bruto (PIB), según recoge el estudio del AXA Research Fund.
Sin embargo, implementar medidas de desarrollo distintas no es tarea sencilla pero precisamente la medición del valor monetario de la biodiversidad, a pesar de las incertidumbres metodológicas es una buena forma, según el estudio, de transmitir el argumento económico de la protección de la biodiversidad a los responsables de la toma de decisiones.
CONEXIÓN ENTRE BIODIVERSIDAD Y ECONOMÍA
Según recoge el documento, las economías dependen de los recursos naturales. Sin embargo, la biodiversidad aún no se ha integrado de forma rigurosa y sistemática en la toma de decisiones. En la publicación se analiza la conexión entre la biodiversidad y el buen funcionamiento de las economías, a través del ejemplo de la proliferación de especies invasoras y su impacto en los sectores económicos, los beneficios de la naturaleza para la salud y el bienestar de las personas, y el papel de los ecosistemas montañosos en el suministro de agua dulce a las comunidades locales.
La Guía destaca que las empresas están reconociendo cada vez más los impactos adversos resultantes de la disminución de la biodiversidad, como pueden ser los riesgos para sus operaciones y cadenas de suministro o los riesgos de responsabilidad, normativos, de reputación y financieros.
Para el AXA Research Fund, la conservación y restauración de la biodiversidad puede ofrecer oportunidades a las empresas en términos de modelos de negocio sostenibles, ahorro de costes y mejora de las relaciones con los grupos de interés o "stakeholders".
En cuanto al sector asegurador y su papel ante la "emergencia climática", el estudio destaca que las aseguradoras desempeñan un papel crucial en proveer cobertura de riesgos, lo que implica fijar el precio de los riesgos, asesorar y proteger a los clientes, y ayudar a minimizar el impacto de los eventos adversos, entre los que cabe destacar la pérdida de biodiversidad.
Algunos productos de seguros, como los fondos de riesgo y los seguros paramétricos cubren el riesgo medioambiental y existe un mercado creciente de seguros de responsabilidad civil medioambiental