MADRID, 4 Jun. (EUROPA PRESS) -
Como parte de un compromiso a largo plazo para reducir la huella medioambiental de los productos y actividades de la empresa, Sanofi lanza un fondo 3 millones de euros a Planet Mobilization para apoyar las ideas y proyectos de los empleados que contribuirán a un medio ambiente más saludable, siendo tres los equipos de Sanofi que tendrán financiación para sus proyectos este año.
Estos últimos años Sanofi ha puesto en marcha 'Planet Mobilization', un programa global de sostenibilidad ambiental integrado en la estrategia a largo plazo de la compañía. El programa abarca todas las actividades y centros de Sanofi y todo el ciclo de vida de los productos, desde las materias primas utilizadas en la producción hasta su eliminación.
"Porque la lucha contra el cambio climático es también una lucha por la salud y el bienestar, Sanofi se compromete con 'Planet Mobilization', afirma el Vicepresidente Ejecutivo de Asuntos Industriales Globales, Philippe Luscan. "Creemos firmemente que nuestros empleados son los agentes más poderosos de un cambio positivo para las personas, y para el planeta", añade, explicando que por ello han decidido crear un fondo de 3 millones de euros para financiar ideas y proyectos procedentes de los empleados que apoyan nuestra ambición en medio ambiente. "Hoy es justo decir que los equipos de todo el mundo aceptaron el reto, incluso más allá de nuestras expectativas. Es la inteligencia colectiva en movimiento", afirma.
UN PROGRAMA EMPRESARIAL PARA APOYAR LAS IDEAS DE LOS EMPLEADOS
Este año, más de 500 empleados de 63 centros de 29 países han participado en el programa de ideación sobre sostenibilidad medioambiental de la empresa. Un programa completo de campamentos de iniciación, 'hackathon', y talleres de ideación dirigidos por el Laboratorio de Innovación de Sanofi han ayudado a los equipos a transformar sus ideas en proyectos sostenibles. Este primer año se han seleccionado tres proyectos ganadores, que serán financiados y ejecutados por el fondo de 'Planet Mobilization' de Sanofi.
Así, el primer proyecto elegido es 'El arroz es el nuevo verde', del equipo de H Chi Minh (Vietnam) de Sanofi, cuyo objetivo es implantar la primera biomasa de cáscara de arroz verde y circularla a gran escala. La cáscara de arroz es un subproducto del procesamiento del arroz en los molinos y puede proporcionar una fuente de energía de biomasa seca conveniente y ambientalmente sostenible. Esto permitirá que el centro de H Chi Minh de Sanofi se convierta en un centro libre de combustibles fósiles, eliminando 2,3 mil de toneladas de dióxido de carbono al año y reduciendo los costes de vapor en un 40 por ciento.
Por otro lado, el proyecto 'IDRA' es una iniciativa de tres países de Europa: Anagni (Italia), Compigne (Francia) y Geel (Bélgica). El proyecto tiene como propósito reciclar las aguas residuales 2/3 tratadas para reutilizarlas directamente en el lugar. Las tres plantas piloto podrían ahorrar hasta 220 millones de litros de agua al año. Esto equivale a llenar casi 70 piscinas olímpicas.
Por último la tercera iniciativa reconocida es 'Waterford ama el Planeta y no el plástico', un proyecto educativo para ayudar a reducir los residuos de plástico en Irlanda. Mediante información a través de programas escolares, programas de restauración de la naturaleza, como la limpieza de costas, y una aplicación que mide los residuos de plástico e incentiva la reducción del consumo, los "embajadores" de Sanofi Irlanda contribuirán a que sus comunidades hagan un uso más equilibrado del plástico y la gestión de sus residuos.
SANOFI QUIERE SER NEUTRA EN CARBONO
Sanofi se ha comprometido a reducir sus emisiones de gases de efecto invernadero en un 55 por ciento para 2030, en consonancia con la limitación del calentamiento global a 1,5 C, y aspira a la neutralidad del carbono para 2050. Los nuevos objetivos de reducción de carbono están validados por la iniciativa Science Based Target, una asociación entre Carbon Disclosure Project, Pacto Mundial de las Naciones Unidas, World Resources Institute y WWF. Para ello, y para minimizar los posibles impactos directos e indirectos de su actividad en el medio ambiente a lo largo de todo el ciclo de vida de sus productos, la empresa se propone diversos objetivos.
En primer lugar, proteger los ecosistemas introduciendo planes de protección de la biodiversidad en todos sus centros situados cerca de zonas sensibles para 2025; aplicar planes de gestión del agua y de eficiencia hídrica en el 100 por ciento de sus centros de producción para 2030; fomentar el diseño ecológico de todos sus nuevos productos y envases para 2025 y de sus productos más vendidos para 2030, y eliminar todos los envases de plástico preformados (blísteres) de sus vacunas para 2027; reducir, reciclar y valorizar más del 90 por ciento de sus residuos para 2025; utilizar un 100 por ciento de electricidad renovable en todas sus operaciones y conseguir un parque automovilístico neutro en carbono, ambos para 2030; y evitar cualquier impacto de sus medicamentos en el medio ambiente en el 100 por ciento de sus centros de fabricación para 2025.
Hasta la fecha, la empresa ha conseguido: reducir las emisiones de GEI de sus actividades en un 27 por ciento desde 2015; diseñar un nuevo envase de cartón totalmente reciclable para vacunas, que sustituye a los blísteres de aluminio y PVC; reutilizar, reciclar y recuperar el 73 por ciento de sus residuos; y reducir un 22 por ciento su extracción de agua de 2015 a 2020.