JEREZ DE LA FRONTERA (CÁDIZ), 4 Ene. (EUROPA PRESS) -
El Juzgado de lo Penal número dos de Jerez de la Frontera (Cádiz) ha condenado a ocho meses de prisión por un delito de atentado y un delito leve de lesiones a un hombre que arrojó un vaso de café ardiendo y amenazó a un profesional del centro de salud de Las Delicias de Jerez, cuando éste le reprochó que accediera al edificio sin mascarilla y fumando.
Según ha informado la Consejería de Salud y Consumo en una nota, los hechos tuvieron lugar el 8 de septiembre de 2020 en este centro sanitario del municipio jerezano, y tal y como se pone de manifiesto en la sentencia, la agresión física o intimidación grave contra profesionales sanitarios en el ejercicio de su función pública asistencial es considerada como delito de atentado por los tribunales de justicia.
En ese sentido, por el delito de atentado le corresponde al acusado la pena de prisión de ocho meses, la inhabilitación especial del derecho de sufragio pasivo durante este tiempo y la prohibición de aproximarse a menos de 200 metros del trabajador, tanto en su domicilio, su trabajo como en cualquier otro lugar que frecuente, así como de comunicarse con él por cualquier medio durante dos años y seis meses. Esta última prohibición también es aplicable en el caso del delito leve de lesiones, el cual, además, implica una pena de un mes de multa con cuota diaria de seis euros y al pago de las costas del procedimiento.
Tanto el Área de Gestión Sanitaria de Jerez, Costa Noroeste y Sierra como la Delegación Territorial de Salud y Consumo han asegurado que "en todo momento" condenan este tipo de episodios violentos. Así, los profesionales del Sistema Sanitario Público Andaluz cuentan desde 2020, tras un acuerdo unánime de la Mesa Sectorial de Sanidad, con un Plan de Prevención y Atención de Agresiones para encontrar puntos de mejora que redunden en una disminución del total de estos ataques verbales o físicos.
Este plan de agresiones incorporó como novedad un programa especial de acompañamiento al personal agredido y un profesional con formación específica que ejerce como guía en la prevención de agresiones y actuación ante las mismas; esta figura del 'profesional guía' tiene el objetivo de acompañar, asesorar en los trámites y dar apoyo al trabajador que sufre una agresión. También habilita canales ágiles y rápidos para que la persona víctima de una agresión ya sea verbal o física, no esté sola momentos después de sufrirla; además, se facilita atención psicológica durante el tiempo que sea necesario.
El plan mejora la coordinación entre los interlocutores policiales territoriales sanitarios, los interlocutores sanitarios, los directivos de los centros y las asesorías jurídicas provinciales, como ha indicado la Consejería.