CÁDIZ 19 Ene. (EUROPA PRESS) -
El servicio de Anestesiología-Reanimación y Tratamiento del Dolor del Hospital Universitario Puerta del Mar de Cádiz ha elaborado un nuevo protocolo para el control y prevención de la hipotermia perioperatoria, de forma que se controle la temperatura corporal del paciente antes, durante y después de una cirugía, evitando así diferentes complicaciones asociadas.
Según han explicado a Europa Press fuentes hospitalarias, el mantenimiento de la temperatura corporal central normotérmica es un objetivo fundamental para mejorar la calidad asistencial de los pacientes puesto que ha demostrado reducir la morbilidad y la mortalidad, lo que se traduce en menores complicaciones y costes sanitarios. Sin embargo, la hipotermia perioperatoria sigue siendo una complicación quirúrgica frecuente y eficazmente evitable si se adoptan las medidas de prevención y de tratamiento oportunas.
Como han explicado los profesionales de esta unidad, el cuerpo humano, a través de una serie de medidas de compensación, mantiene un rango de normotermia que oscila entre los 36-37,5 grados centrígrados. No obstante, en el entorno perioperatorio, más del 90 por cienito de los pacientes operados padece un descenso de temperatura por debajo de 36 grados, consecuencia del acto anestésico-quirúrgico y debido a diversos factores, como pueden ser la anestesia, la infusión de líquidos, el tiempo quirúrgico, el tamaño de exposición de la herida quirúrgica, las características de los pacientes y su estado basal, entre otros.
La hipotermia en los pacientes conlleva una serie de respuestas por el organismo, de diferente gravedad. Algunas de ellas son hiperglucemia, incremento del riesgo de infección de la herida quirúrgica, mayor pérdida de sangre, eventos cardiovasculares, tiempos de recuperación prolongados e incomodidad de los pacientes por la desagradable experiencia de padecer frío.
El Servicio de Anestesia-Reanimación y Tratamiento de Dolor del Hospital Universitario Puerta del Mar de Cádiz ha trabajado en equipo para abordar este asunto. Así, se han analizado las necesidades del hospital, se han identificado los retos clínicos a los que se enfrentan a diario y se han evaluado los requerimientos prácticos.
A continuación, siguiendo las guías y sociedades nacionales e internacionales sobre recomendaciones de prevención y hipotermia perioperatoria, se ha elaborado un nuevo protocolo, que se adapta a las características de los centros en que trabaja este equipo, es decir, tanto el Hospital Universitario Puerta del Mar de Cádiz y como el Hospital San Carlos de San Fernando.
Este protocolo tiene en cuenta fundamentalmente dos puntos para adaptar e individualizar a cada paciente según las características de morbilidad y de tipo de cirugía al que son sometidos. El primero de esos puntos es monitorizar la temperatura perioperatoria de los pacientes para guiar el objetivo prioritario de la normotermia; y el segundo, usar dispositivos que proporcionen o mantengan el calor, a través de mantas con aire forzado caliente sobre o debajo de los pacientes, y sistemas de infusión de líquidos con calentador de fluidos.
Los autores del protocolo han sido los especialistas de Anestesiología del centro Francisco Javier Arroyo, Manuel Valero y Luis Miguel Torres, y está diseñado con la finalidad de normalizar y unificar la práctica clínica del control de la temperatura de todos los pacientes del entorno perioperatorio, a partir de una información concreta, no extensa y fácil de cumplir, accesible rápidamente con la visualización de carteles en las áreas de circuito quirúrgico, salas de despertar y de reanimación del Servicio de Anestesia. Su diseño lo hace extensible a todos a los profesionales implicados en la atención del paciente quirúrgico, incluyendo a anestesiólogos, cirujanos y equipos de enfermería.