MÁLAGA 14 Jun. (EUROPA PRESS) -
El Consejo de Gobierno de la Junta de Andalucía ha tomado conocimiento del convenio de colaboración firmado entre la Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible y la Universidad de Córdoba (UCO) para avanzar en la preservación genética de especies susceptibles de caza presentes en Andalucía.
Tal y como ha indicado el Gobierno andaluz en una nota, ambas instituciones unirán recursos para evaluar las condiciones ambientales, genéticas y de seguridad y sanidad animal que deben regir en el desarrollo de la actividad de las granjas cinegéticas.
Esta cooperación se articula atendiendo a un convenio de dos años de duración que contempla, entre otras actuaciones, impulsar el conocimiento de la situación actual de las granjas cinegéticas y otras instalaciones ligadas a la cría en cautividad de especies susceptibles de caza. También prevé el análisis de posibles actuaciones de mejora.
Andalucía cuenta con más de 7.500 cotos de caza y en muchos de ellos se contempla la repoblación con especies cinegéticas o las sueltas de animales, si bien es necesario contar con los espacios denominados 'escenarios' para poder realizar esta segunda actuación.
En ambos casos, estas acciones están sujetas a una normativa estricta para evitar que, por ejemplo, se vea afectada la dinámica de las poblaciones naturales. La genética de los ejemplares criados en granjas no puede ser diferente a la de los animales silvestres, para evitar que pueda aparecer hibridaciones. Por esta razón, todos los ejemplares legalmente liberados en el medio natural deben disponer de una certificación genética.
En el caso concreto de las perdices, deben provenir de granjas certificadas u homologadas; en el caso de caza mayor, contar con certificados desde la granja de origen.
Ante esta situación, entre las iniciativas previstas en el convenio se encuentra el estudio de las sueltas y repoblaciones de especies cinegéticas que se realizan actualmente con el fin de establecer el tamaño y proporción adecuados para la ejecución de estas medidas de gestión en los terrenos andaluces, así como los controles genéticos de los animales producidos en las granjas o transportados desde instalaciones de este tipo ubicadas fuera de la comunidad para su incorporación al medio natural andaluz.
Por otro lado, la colaboración entre estas dos instituciones incluye también la realización de censos y de un seguimiento científico, de supervivencia y productividad de la tórtola europea ('Streptopelia turtur') con el fin de aportar la información necesaria para el desarrollo de un Plan de Caza Adaptativo. Esta planificación base es necesaria para la gestión sostenible de su captura en Andalucía.
El convenio recoge también que la Unidad de Investigación de Recursos Cinegéticos y Piscícolas de la Universidad de Córdoba continuará ofreciendo asesoramiento científico a la Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible en materia cinegética.
La caza sostenible, entendida como una acción compatible con la conservación de la biodiversidad y el mantenimiento de los hábitats, "tiene un importante significado económico y social en Andalucía". La actividad cinegética es un "elemento vertebrador del medio rural, ya que genera riqueza en los pueblos y contribuye a fijar su población", ha apostillado la Junta.