CÓRDOBA 6 Abr. (EUROPA PRESS) -
La delegada territorial de Igualdad, Salud y Políticas Sociales de la Junta de Andalucía en Córdoba, María Ángeles Luna, junto a la directora de la Estrategia de Cuidados de la Consejería de Salud, Nieves Lafuente, ha asistido este miércoles a la presentación de la nueva Estrategia de Cuidados de Andalucía, de la que la delegada ha destacado la importancia de la colaboración entre ciudadanos, profesionales y familiares para mejorar los resultados en salud de la ciudadanía a través del cuidado excelente que ofrece el conjunto de profesionales de enfermería de Andalucía.
Durante el acto, Luna ha destacado que "esta estrategia propone un modelo de cuidados que en un entorno multidisciplinar que potencie la promoción de la salud y la prevención, el abordaje integral de la cronicidad, el autocuidado, la atención a personas con alta complejidad en domicilio y la participación de la comunidad" y ha incidido en la importancia del uso de las nuevas tecnologías como medio de comunicación entre profesionales y ciudadanía y para la gestión de conocimiento.
Así, la estrategia está orientada a tres escenarios: mejorar la respuesta a las necesidades de la ciudadanía, potenciar el desarrollo profesional y garantizar la sostenibilidad del sistema sanitario público andaluz.
En este sentido, el trabajo en estos tres escenarios confluye para reforzar el compromiso de Andalucía con la universalidad, la sostenibilidad y la calidad de su sistema sanitario público. Por ello, en la estrategia se han considerado prioritarios los proyectos que mejoran la accesibilidad y la continuidad de los cuidados y que más aportan en términos de resultados en salud, la capacitación ciudadanía para su autocuidado y para una gestión de su propia salud.
Entre otras, la aplicación de la estrategia trata de dar respuesta a las necesidades de cuidados derivadas del avance en la cronicidad. En Andalucía, una de cada dos personas adultas tiene enfermedad crónica (nueve de cada diez cuando hablamos de personas mayores de 75 años); más de 100.000 personas presentan pluripatología; y el 88 por ciento de los cuidados se producen en el entorno familiar, a cargo de las mujeres de la familia, mucho más en entornos rurales alejados.
En Andalucía, la atención a la cronicidad se basa en un trabajo compartido entre atención primaria y hospitalaria, ha señalado Luna, "con un fuerte liderazgo de los equipos de atención primaria para garantizar una respuesta integral, coherente y longitudinal, en cooperación con los servicios sociales de todos los niveles".
Con este modelo, se pretende reforzar la intervención sobre los determinantes sociales y las condiciones de vida, que están en la base de la mayoría de los problemas crónicos de salud.
OBJETIVOS PRIORITARIOS
Entre sus proyectos de desarrollo prioritario que se materializan en seis objetivos que buscan dar respuesta a las necesidades de mejora incrementando la calidad y la continuidad de los cuidados en Andalucía, están fomentar la participación ciudadana y la responsabilidad compartida; la accesibilidad, personalización y continuidad de cuidados; el desarrollo de nuevas competencias; participar en el avance de la prevención y atención a la cronicidad, garantizar unos cuidados seguros y utilizar las TIC en el desarrollo y avance de los cuidados en Andalucía.
La iniciativa se inserta en el marco del Plan Andaluz de Salud y el Plan de Calidad de la Consejería y se articula de manera transversal con los Planes Integrales definidos para Andalucía. Todos ellos participan en el objetivo común de fortalecer la sanidad pública y universal, como el mejor instrumento para garantizar el derecho a la protección de la salud en la población andaluza.
Luna ha explicado ante los profesionales del sistema sanitario público andaluz que ahora "nos corresponde implantar esta estrategia de la manera más adecuada a la realidad de cada centro, de cada población y de cada territorio".
En la elaboración de esta estrategia han colaborado: profesionales de la Consejería y el Servicio Andaluz de Salud, directores de planes y planes integrales, cargos directivos, cargos intermedios, lideres informales, enfermeros asistenciales y otros profesionales del SSPA que participan del cuidado (matronas, médicos, fisioterapeutas, terapeutas ocupacionales, psicólogos y trabajadores sociales), además de profesionales de universidades, asociaciones y sociedades científicas, asociaciones de consumidores y pacientes. Con todos ellos, se han ido estableciendo las alianzas necesarias para ir sumando valor a los proyectos estratégicos que vamos emprendiendo.
APORTACIONES DE LA CIUDADANÍA
Un aspecto importante de esta estrategia son las aportaciones de la ciudadanía en relación con los cuidados. De ellas se han obtenido algunas claves para emprender la mejora como: la necesidad de avanzar en las competencias profesionales para el cuidado, para la cercanía y humanización, la comprensión y la empatía; de avanzar en la continuidad de la atención a lo largo del proceso, incluyendo aspectos emocionales y relacionales y compartiendo la atención entre profesionales, las personas atendidas, personas cuidadoras, asociaciones y recursos comunitarios.
Además de recoger las aportaciones ciudadanas, el proceso de elaboración de la estrategia también ha incluido un análisis de los recursos y servicios relacionados con los cuidados en la sanidad pública andaluza. Se ha prestado especial cuidado a los modelos de atención basados en la enfermería de práctica avanzada. Con ellos Andalucía se ha situado en una posición de avance en el conjunto del país, en términos de calidad y eficiencia global.
Igualmente, la directora de la estrategia, Nieves Lafuente, ha explicado que "con la Estrategia de Cuidados de Andalucía pretendemos ayudar a la ciudadanía andaluza a prevenir o retrasar en la medida de lo posible la cronicidad, la fragilidad y por lo tanto la dependencia aportándoles el conocimiento necesario para que tomen sus propias decisiones en la gestión de su salud".
En este sentido, Lafuente ha añadido que "prestar unos cuidados accesibles, personalizados, continuados, seguros y humanizados a las personas cuando enferman y a sus familiares desde el diagnóstico hasta el desarrollo de un plan de rehabilitación y recuperación, integrando los aspectos emocionales y relacionales, buscando siempre la continuidad de sus propios proyectos de vida".
Para ello, hay que "rediseñar nuestros servicios dando un papel protagonista a la ciudadanía a través de canales de comunicación bidireccionales, desarrollando mayores competencias en los profesionales de enfermería y potenciar el trabajo en red para sumar sinergias con otros sectores y entidades. Entre todos lo conseguiremos, y las enfermeras tenemos la obligación ética y profesional de ser un líder activo en ese camino".