CÓRDOBA 5 May. (EUROPA PRESS) -
Las carreteras de Córdoba pertenecientes a la red autonómica registraron el pasado ejercicio 2016 un incremento en la circulación de vehículos del 3,4 por ciento respecto a 2015, una cifra que continúa con la recuperación del crecimiento registrada en el año anterior, del 3,2 por ciento, después de la tendencia negativa acumulada por el transporte por carretera desde el inicio de la crisis económica.
Así lo ha detallado la Consejería de Fomento y Vivienda de la Junta de Andalucía en una nota en la que ha señalado que estos datos se extraen del Plan General de Aforo 2016, elaborado por la propia Consejería para medir la Intensidad Media Diaria (IMD) de las vías autonómicas, que en el conjunto de la comunidad se ha incrementado un 4,7 por ciento.
En la provincia de Córdoba los vehículos ligeros (motos, turismos y furgonetas de pequeño tamaño) y los pesados (camiones, autobuses y otros) recorrieron 706 millones de kilómetros, de los que 664 millones corresponden a los primeros, lo que equivale al 94 por ciento del total; mientras que los vehículos pesados cubrieron el seis por ciento restante (42 millones). A pesar del incremento del tráfico de vehículos ligeros del 3,9 por ciento, el de pesados ha sufrido aún una reducción del 2,2 por ciento.
La medición de la demanda de tráfico está ligada concretamente a la red de vías básicas y a la de carácter intercomarcal. La malla básica es la que da soporte a los desplazamientos de largo y medio recorrido, y en Córdoba se extiende a lo largo de 205 kilómetros; y la red intercomarcal, con una longitud de 634 kilómetros, está compuesta por aquellas vías que complementan a la anterior y canalizan los tráficos interurbanos de medio recorrido entre ámbitos subregionales.
En conjunto, ambas redes suman 839 kilómetros, distribuidos en 25 carreteras. Teniendo en cuenta estas tipologías, el incremento de la circulación fue ligeramente superior en la red intercomarcal que en la básica. Así, en 2016 la primera soportó un tránsito de 430 millones de kilómetros, lo que implica un incremento del 3,6 por ciento respecto del año 2015, mientras que la básica absorbió un tráfico de 276 millones de kilómetros, con un incremento que supera el tres por ciento.
En todas las carreteras de la red básica de la provincia se detectaron incrementos de tráfico comprendidos entre el 1,9 por ciento y el 4,3 por ciento. Concretamente en la A-304 (4,3%), la A-307 (3,5%), la A-318 (3,3%), la A-339 (3,9%), la A-309(1,9%) y la A-306 (1,7%).
Por su parte, el 80 por ciento las vías de la malla intercomarcal de la provincia aumentaron su circulación en 2016. Los comportamientos de la red variaron en una horquilla que oscila entre un alza del 9,9 por ciento y una caída del 4,2 por ciento, aunque la mayoría se sitúan entre el 5,6 por ciento y el -2,4 por ciento.
Los incrementos más significativos se experimentaron en la A-386 (9,9%), la A-431 (5,6%), la A-342 (5,0%) y la A-431 (4,6%) y Los descensos, en la A-420 (-4,2%) y la A-430 (-2,4%).
PLANES DE AFOROS
La Consejería de Fomento y Vivienda realiza desde el año 1992 los Planes Generales de Aforos de las Carreteras de Andalucía, que tienen como objetivo el conocimiento, lo más detallado y completo posible, de los flujos que recorren los diversos tramos de carreteras de la red andaluza.
Se trata de una información muy valiosa para evaluar nuevas inversiones en infraestructuras y para la planificación de prioridades en las tareas de conservación y mejora de la red. Los parámetros estudiados y los resultados obtenidos constituyen además una ayuda inestimable para los estudios de accidentalidad y los relacionados con los impactos ambientales.
Las intensidades de tráfico medidas en estos planes son registradas a intervalos de una hora durante todo el día a través de diferentes estaciones, que se fijan en función de la jerarquía de la carretera y el volumen de tráfico que canaliza.
Esas estaciones pueden ser permanentes, cuando registran el tráfico los 365 días al año; primarias, si aforan cuatro días (jueves a domingo) cada dos meses; secundarias, si la recogida de datos se lleva a cabo durante un día laborable cada dos meses; y de cobertura, se analizan los tráficos durante un día laborable al año.