GRANADA 18 Oct. (EUROPA PRESS) -
El consejero de Salud y Familias de la Junta de Andalucía, Jesús Aguirre, ha recalcado este lunes que "hemos superado la quinta ola, pero no lo pandemia" de la covid-19, pues una mutación o una variación del virus nos puede llevar "a la casilla de salida", por lo que ha llamado a la "prudencia" y a seguir las medidas de protección.
Aguirre, que ha participado en un desayuno informativo de 'Ideal', ha hecho hincapié en que "hay que tener muy presente" que el virus "sigue con nosotros" y una gran parte de la población mundial no está vacunada. Así, mientras en Andalucía el índice de vacunación está en el 90 por ciento, a nivel mundial no supera el 25 y las previsiones son que para finales de año se llegue al 35 por ciento de la población vacunada.
Así las cosas, el consejero andaluz ha recordado que en un mundo globalizado una variación que no sea sensible a los anticuerpos por inmunidad adquirida o inmunidad por vacuna nos haría volver "a la casilla de salida" y "a empezar de cero" en la búsqueda de una nueva vacuna, por lo que "estamos vigilantes", ha dicho, "haciendo secuenciaciones de cada cepa y antes de que nos llegue estar lo más prevenidos posible".
El consejero ha hecho hincapié en que la vacuna "ha sido la solución" frente a este virus y en Andalucía se ha respondido muy bien, aunque aún quedan 590.000 andaluces a los se intenta "convencer" de la importancia de este proceso de inmunización que ha evitado 5.000 muertes en esta comunidad.
Aguirre ha confirmado también que Salud mantiene la pretensión de vacunar a partir de primeros de noviembre a los menores de cinco a once años en los propios colegios. Para ello se está a la espera de la autorización de la Agencia Europea del Medicamento y una vez obtenida se activarán las unidades móviles de vacunación en coordinación con la Consejería de Educación.
Ante el inicio de la campaña de la gripe a mayores de 65 años y del neumococo, el consejero ha confirmado que a quienes cumplan los criterios se les pondrán "las tres de golpe sin ningún problema" usando los dos brazos.
Preguntado sobre cuándo podría llegar el final del uso de las mascarilla tanto en la calle como en el patio de los colegios, Aguirre se ha mostrado partidario de no olvidar lo aprendido en este tiempo. Ha recordado que la mascarilla "protege" no solo de la covid-19 sino de otras enfermedades como la gripe o infecciones respiratorias agudas de modo que "lo que no se puede hacer es lo de antes", ha dicho, "cuando uno cogía un trancazo y se iba a la oficina o en el metro estornudando".
Ha opinado así que ahora la mascarilla debe ser algo "que esté mucho más cercano" y normalizado, de forma que en determinadas circunstancias sea habitual llevarla en el bolsillo y usarla con más frecuencia. Así, y sin que esto signifique que haya que llevarla "continuamente", sí se ha mostrado convencido de que "este aprendizaje" derivado de la pandemia "se va a mantener durante muchísimo tiempo".
Por otra parte, al ser preguntado sobre los momentos en que hubo diferencias en los número de fallecidos por covid que computaba el Gobierno central frente a las cifras remitidas por las comunidades autónomas, Aguirre ha opinado que "fue una maniobra rarísima" pues las cifras que daba Madrid "no coincidían con las sumas que daban las comunidades" y "ellos no lo reflejaban en las estadísticas". "Fue una polémica que tuvimos, yo no estaba dispuesto a que se pusiera menos número, era jugar con los muertos", ha clamado el consejero.