Más de 450 personas de la zona norte de Granada se han formado como cuidadoras desde 2003

GRANADA, 13 Jun. (EUROPA PRESS) -

Más de 450 personas, residentes en la zona norte de Granada capital, se han formado como cuidadoras de dependientes y mayores, gracias a un programa de la Junta de Andalucía, con la colaboración de otras instituciones como el Ayuntamiento de la ciudad y colectivos como las asociaciones Anaquerando, Romi, Adultos Cartuja o el Colectivo Salud Norte, entre otros.

Así lo ha dado a conocer este martes el delegado territorial de Igualdad, Salud y Políticas Sociales de la Junta de Andalucía en Granada, Higinio Almagro, en el acto de clausura de la vigésimo octava edición del curso de auxiliares de ayuda a domicilio.

Este acto se ha celebrado en el centro de salud de Almanjáyar, el mismo lugar donde se ha desarrollado esta actividad formativa con los once alumnos, ocho mujeres y tres hombres que han participado en esta edición de la que se celebran dos al año. La media de alumnos por taller es de 18 alumnos. Los profesionales sanitarios de este centro de salud tienen a su cargo la formación de las personas que siguen el programa.

El objetivo de esta iniciativa es doble pues, por un lado, forma a las personas participantes en el cuidado de personas dependientes de forma que "puedan incorporarse al mercado laboral" y, por otro, "favorece la atención de personas mayores que viven solas y que necesitan la ayuda de alguien para realizar determinadas tareas o simplemente salir a la calle".

Higinio Almagro ha subrayado la importancia de esta fórmula de trabajo "en la que una actividad formativa es liderada por las asociaciones de la zona y las administraciones respaldan y acompañan en línea con las medidas adoptadas por el Gobierno andaluz para luchar contra la exclusión social". La inversión total invertida desde el comienzo del programa en 2003 supera el millón y medio de euros.

Manuela, una de las participantes, ha mostrado su satisfacción por la salida laboral que ha supuesto para ella pero también por todo lo "aprendido de las personas" a las que ha ayudado en este tiempo.

Este programa formativo es elaborado junto a los responsables y miembros de las asociaciones participantes, que también se encargan de seleccionar como alumnos a personas del barrio. Una vez finalizado este curso las personas que han superado el mismo comienzan a desarrollar lo aprendido bajo contrato laboral y atendiendo a otros vecinos y vecinas que necesitan ayuda.

De las más de 450 personas formadas hasta el momento, en torno al 45 por ciento está desarrollando esta actividad profesionalmente tras un periodo de tutelaje por miembros de las asociaciones que lideran el programa.