La Junta abre los nuevos accesos a El Rocío tras una inversión de más de un millón de euros

ALMONTE (HUELVA), 23 (EUROPA PRESS)

La Consejería de Fomento y Vivienda ha puesto este martes en servicio los nuevos accesos a la aldea de El Rocío, tras una inversión de 1,09 millones de euros y seis meses de trabajo, hecho que, según ha subrayado el titular de ese departamento de la Junta, Felipe López, "cumple los plazos previstos de unas obras que mejorarán la movilidad en la aldea, especialmente durante la celebración de la romería".

Según ha informado la Junta en una nota de prensa, el único acceso existente hasta ahora era un vial en la A-483, si bien esta carretera limitaba la circulación y no ofrecía la capacidad necesaria para absorber los movimientos y las concentraciones que cada año se producen con motivo de la romería del Rocío. Por este motivo, el Gobierno andaluz ha construido los dos nuevos accesos, que servirán de alternativa al hasta ahora vial de entrada a la aldea almonteña.

La actuación ha consistido en la construcción de dos accesos, uno al sur y otro al norte. El ramal de acceso por el norte es bidireccional y cuenta con una longitud de 856 metros aproximadamente. Además, para mejorar la condiciones de seguridad vial de la intersección, se ha construido una glorieta desde la que parte dicha entrada a la aldea.

Por su parte, el nuevo acceso sur ha consistido en la ejecución de un ramal unidireccional de 427 metros aproximadamente de entrada a la aldea. En el diseño del trazado se ha tenido como máxima prioridad la menor afección al medio y, más concretamente, al importante arroyo de La Rocina.

Ambas infraestructuras lograrán mejorar la movilidad en esta zona de afluencia turística que recibe miles de visitantes durante la romería y a lo largo de todo el año, además de otorgar fluidez al tráfico que se desplaza por dicha vía a las zonas costeras.

López ha destacado además el "diálogo permanente" que ha predominado durante la planificación y ejecución de esta solución, "fruto del consenso" entre la Junta, Ayuntamiento de Almonte y los diferentes agentes económicos y sociales locales, que concilia los intereses ambientales, económicos, turísticos y sociales planteados.

"Esta actuación es fruto del trabajo bien hecho, de aunar voluntades y de conjugar intereses y hoy los accesos a la aldea son más seguros, más fluidos, respetuosos con el medio ambiente, compatibles con las explotaciones agrícolas y con los intereses de la actividad turística", ha añadido.

Por su parte, la alcaldesa de Almonte, Rocío Espinosa, ha destacado que se trata de un día "importante" para la aldea, al tiempo que ha remarcado que estos nuevos accesos son "esenciales" sobre todo ante la inminente celebración de la romería del Rocío.

Tras agradecer a la Junta "su escucha" a todas las partes implicadas en esta infraestructura, Espinosa ha señalado que estos nuevos accesos mejoran la seguridad en la entrada a El Rocío, por lo que ha reiterado su agradecimiento a la administración regional por estos nuevos accesos.

La Consejería de Fomento y Vivienda puso en servicio la variante de El Rocío en la A-483 en julio de 2012 tras una inversión de 12 millones de euros. Esta carretera de circunvalación tenía entre sus bondades una mejora sustancial de la regulación del tráfico. Para ello, se evitó el obligado paso por El Rocío a quienes tuvieran como punto de destino las playas de Matalascañas.

Sin embargo, aunque las distintas glorietas repartían la circulación a los diferentes destinos, el único acceso de entrada y salida a la aldea generaba un cuello de botella que ralentizaba el tránsito, dificultando las labores de evacuación, principalmente durante los periodos de máxima afluencia de vehículos, por lo que la Junta diseñó los dos nuevos accesos abiertos este martes.

Esta actuación se incluye entre los nuevos proyectos contenidos en el Plan de Infraestructuras para la Sostenibilidad de Andalucía, 'Pista 2020', programación que cuenta con un presupuesto de unos 1.300 millones y donde se prevé, además de las nuevas licitaciones, la reactivación de obras ya iniciadas para garantizar su rentabilidad social.