QUESADA (JAÉN), 13 Nov. (EUROPA PRESS) -
El consejero de Cultura de la Junta de Andalucía, Miguel Ángel Vázquez, ha visitado este lunes en Quesada (Jaén) el yacimiento villa romana de Bruñel, donde en los próximos días se iniciará una serie de trabajos de recuperación y preservación, por valor de 360.000 euros.
Estas tareas van a permitir poner en marcha un espacio de acceso, acogida e información al yacimiento, la creación de recorridos accesibles que delimiten las zonas de paso del público y la demarcación del espacio protegido. Asimismo, se cambiará la cerca que acota el emplazamiento y se sustituirán las cubiertas de protección de las zonas de mosaicos para permitir su visualización y evitar los problemas de humedades.
Vázquez, que ha estado acompañado en la visita por el alcalde del municipio, Manuel Vallejo Laso, y la delegada territorial, Pilar Salazar, ha puesto el acento en la importancia del esfuerzo sostenido que desde la Junta se realiza para revitalizar el patrimonio cultural andaluz. "El objetivo de la Junta de Andalucía es poner en valor el patrimonio. Hay que cuidarlo, protegerlo, conservarlo y ponerlo a disposición de la ciudadanía", ha apostillado.
Según ha explicado, Bruñel "tiene restos materiales de incalculable valor y una interesante colección de mosaicos" que hay que hacer posible que sean visitados. En este sentido, ha destacado que "el patrimonio es riqueza, es una inversión de futuro, y el turismo cultural al día de hoy se está convirtiendo en el segmento que más crece dentro del turismo" en la comunidad autónoma.
"Tres de cada diez visitantes vienen a nuestra comunidad por razones de la cultura del patrimonio o de la programación cultural. Por tanto, todo lo que hagamos en este sentido, aparte de proteger y conservar el patrimonio, serán elementos que estaremos poniendo a favor del desarrollo económico y también del turismo" ha subrayado el consejero.
El asentamiento arqueológico de la villa romana de Bruñel se localiza en el término municipal de Quesada, en la vertiente oriental de la Sierra de Cazorla. Está enclavada en una loma al sur del Arroyo de Bruñel, a 640 metros de altitud sobre el nivel del mar.
Está formado por una necrópolis ibérica que se remonta al siglo IV a.C. y una ocupación romana que se extiende desde el siglo II al IV d.C., que presenta los restos de una villa del siglo III d.C. con patios, peristilos, impluvium y una interesante colección de mosaicos.