JAÉN, 1 Jul. (EUROPA PRESS) -
Un total de 33 profesionales del Hospital Alto Guadalquivir, en Andújar (Jaén), se han formado en soporte vital básico (SVB) y soporte vital avanzado (SVA), además del uso de desfibrilador semiautomático en base a las últimas recomendaciones del Consejo Europeo de Resucitación.
Estas prácticas profesionales están destinadas a la identificación, interpretación, argumentación y resolución de un problema o situación en un contexto laboral específico. Según ha afirmado el coordinador del curso, el doctor Castellano Hernández, "un profesional es tanto más competente en tanto mayor capacidad tenga de aplicar los conocimientos y destrezas al desarrollo de su práctica profesional".
Ha añadido que la cadena de actuaciones es "útil en muchas situaciones de emergencias, como un ataque cardíaco o un ahogamiento, en las que la respiración o los latidos del corazón de una persona se han detenido". Por eso, cuando alguien sufre un episodio de muerte súbita y es atendido en forma inmediata con maniobras básicas de RCP y acceso a la desfibrilación precoz, lo que "puede aumentar dos y tres veces las posibilidades de sobrevivir".
Cada una de estas formaciones está dividida en seis bloques, adaptada cada una de ellas al nivel de especialización específicos, además de un bloque común relacionado a la definición de la cadena de supervivencia y el reconocimiento y actuación en una situación de parada cardiorrespiratoria.
Al curso de soporte vital básico han acudido técnicos especialistas en cuidados de enfermería (TCAE), enfermeros, celadores y administrativos --23 en total--, que también han profundizado sobre las compresiones torácicas y ventilaciones de rescate; el uso de la desfibrilación semiautomática; la posición lateral de seguridad; y la obstrucción de la vía aérea por cuerpo extraño.
Por su parte, los alumnos del curso de soporte vital avanzado --diez entre facultativos y personal de enfermería--, han abundado en el deterioro del paciente y la prevención de la parada cardiorrespiratoria, el acceso vascular y fármacos que se usan en el SVA y la monitorización electocardiográfica, además de aspectos específicamente vinculados al SVA.
Los dos cursos tienen tiene una parte presencial y otra para realizar online. Durante la presencial, las técnicas didácticas utilizadas han sido la explicación oral del tema combinada con discusión y debate entre los asistentes con el objetivo de intercambiar ideas y opiniones.
También se han llevado a cabo la resolución de casos a través de descripciones reales o ficticias en las que se plantea un caso o problema en que el alumno, de forma individual o grupal, debe consensuar una única solución, respondiendo a las preguntas y peticiones que se plantean teniendo como marco de referencia sus conocimientos y experiencia personal.
La parte online se basa fundamentalmente en un foro, donde el grupo expresa sus ideas y opiniones sobre un asunto que plantean los moderadores. En todas ellas se aplica el mentoring, que es el proceso relacionado con la mejora, mediante el cual las personas con más experiencia en una materia específica (el mentor) enseña, aconseja, guía y ayuda al alumno en su desarrollo profesional.
Los docentes han sido profesionales del Hospital Alto Guadalquivir, en concreto un facultativo de medicina intensiva, dos médicos de Medicina de Familia y dos enfermeros, todos expertos y acreditados en esta materia.