MÁLAGA 22 Sep. (EUROPA PRESS) -
El consejero de Economía y Conocimiento, Antonio Ramírez de Arellano, ha destacado que el impacto de las universidades andaluzas en la economía de la comunidad autónoma se sitúa en torno a los 7.000 millones, con la consiguiente repercusión positiva sobre el PIB de la región. "Son focos de atracción de inversiones y recursos muy importantes para la sociedad andaluza", ha asegurado.
Así lo ha señalado en su intervención en el acto de apertura del curso académico de la Universidad de Málaga (UMA), al tiempo que ha explicado que el sistema universitario andaluz maneja un presupuesto de más de 1.700 millones de euros, y que diversos estudios señalan que por cada euro invertido en educación superior "éste se multiplica por cuatro euros en su repercusión sobre el territorio".
El consejero ha subrayado la capacidad de las universidades para captar inversiones "de forma competitiva en materia de investigación", recordando que en la última década ha captado más de 300 millones del Plan Nacional de Investigación, denotando "la calidad, la capacidad y el prestigio" que han alcanzado las instituciones docentes andaluzas.
A esto se une, ha dicho, "una conexión cada vez más estrecha y relevante con las empresas andaluzas", a las que transfieren conocimiento y aportan personal cualificado. Asimismo, "constituyen un foco de atracción y retención de talento, con unos recursos humanos que están especialmente bien formados", ha manifestado Ramírez de Arellano.
"Debemos reconocer que las universidades son un gran proyecto social en el que la sociedad se mira y a las que se le reconoce la enorme labor que desempeñan", ha destacado el consejero, quien ha subrayado en especial la potencia de las universidades andaluzas en materia de I+D+i y ha subrayado el convencimiento del Gobierno andaluz de que éstas "no deben ser sólo agentes sino protagonistas en investigación".
FINANCIACIÓN
En el ámbito económico, ha señalado que la Junta trabaja con las universidades en el nuevo modelo de financiación de las universidades "que les dé certidumbre" y el cual debe descansar, ha apuntado, "sobre tres elementos: la consolidación de estructuras acordes con las necesidades actuales y futuras, alcanzar el consenso en el reparto de fondos y también en una evolución plurianual del gasto con el fin de acercar el nivel de inversión al de los países europeos --1,3 por ciento del PIB--.
Así, ha especificado que en 2017 el Gobierno andaluz "ha incrementando la financiación básica de las universidades", complementándola con planes de excelencia y con una financiación competitiva para investigación e innovación, así como con los planes de apoyo dirigidos al alumnado.
En este sentido, ha defendido una financiación directa "suficiente" porque "no puede ser que las universidades tengan que competir por elementos básicos".
En cuanto a los planes de excelencia, a los que en 2017 se han destinado 36 millones de euros para financiar diversas actuaciones, contemplan diversas actuaciones entre las que destacan las dirigidas a la internacionalización o el apoyo de los Campus de Excelencia Internacional como el Andalucía Tech, de la que es promotor la UMA junto a la Universidad de Sevilla, y que el consejero ha definido como un "caso de éxito".
Por lo que respecta a la financiación competitiva, el instrumento de referencia es el Plan Andaluz de Investigación, Desarrollo e Innovación (Paidi), y donde el consejero ha anunciado que habrá próximas convocatorias de incentivos. El plan ha supuesto la movilización este año de más de 460 millones de euros para toda Andalucía y en su ámbito se han transferido unos 40 millones de euros para la contratación de personal de apoyo a la investigación en las universidades.
Por otra parte, Ramírez de Arellano ha subrayado el esfuerzo económico que ha realizado la Junta de Andalucía para "recuperar la normalidad y la certidumbre" en el ámbito de la gestión universitaria, donde "se ha logrado resolver el problema de tesorería que las aquejaba"; se ha acotado la deuda, cuyo pago se hará en el marco del nuevo modelo de financiación; y se ha incrementado sensiblemente la ejecución presupuestaria, creciendo un seis por ciento el pasado ejercicio 2016.
El consejero ha recalcado que la universidad "la hacen las personas", por lo que considera "importante" que el personal de las universidades "inicie la senda de la recuperación de derechos" perdida con la crisis. En este sentido, ha animado a los rectores a que se "alíen" con la Junta de Andalucía para ser en este campo "de nuevo un referente en España".
Por lo que respecta a los alumnos, ha recordado que este curso el Gobierno andaluz ha puesto en marcha la bonificación al 99 por ciento de los créditos aprobados en primera matrícula, con la que "se avanza hacia la gratuidad de la enseñanza". Una medida que ha pedido al Gobierno central "que nos copie" y que en Andalucía es "estructural e irreversible, acercando a la comunidad autónoma a la situación de los países de referencia europeos, donde las matrículas son gratuitas o simbólicas".
Ramírez de Arellano ha recordado que la bonificación "premia el esfuerzo" de los estudiantes universitarios "reduciendo hasta cifras simbólicas" el coste de las matrículas. Además, ha reivindicado "la gratuidad completa del sistema", algo que ha instado al Gobierno a extender a toda España.
Así, un alumno con un buen rendimiento podrá terminar sus estudios de grado habiendo pagado prácticamente solo el primer curso --el 75 por ciento del coste total-- y hacer un máster casi gratis. Por su parte, la Junta de Andalucía compensa a las universidades económicamente por esta medida para que no pierdan nivel de ingresos.
La bonificación viene a reforzar los planes de apoyo de las universidades, que también contemplan ayudas a la acreditación en idiomas (B1), Erasmus o para situaciones de especial dificultad. Además, también se arbitran medidas para potenciar la excelencia entre el alumnado, con becas como las Talentia para estudios de postgrado en el ámbito internacional, becas de colaboración o los más de 1.300 contratos para personal de apoyo a la investigación convocados este año, entre otras.
Asimismo, ha puesto en valor que las universidades andaluzas, con el respaldo de la Junta de Andalucía, han logrado "extender al resto de las universidades del país su postura", logrando que el Gobierno "diera marcha atrás y la prueba de acceso a la universidad haya sido este año muy similar al anterior". De esta forma, el estudiante sigue haciendo un examen de forma anónima y puede elegir universidad en función de su mérito y capacidad.