Alonso detalla en comisión las actuaciones que se realizan para abordar las patologías retinianas y dar cumplimiento a la PNL sobre esta materia
SEVILLA, 18 May. (EUROPA PRESS) -
La sanidad pública andaluza ha incluido en el nuevo diseño del examen de salud para mayores de 65 años el despistaje de la baja visión y de la degeneración macular asociada a la edad, ya que hay evidencia positiva sobre la detección precoz en consulta de atención primaria en población vulnerable, como este colectivo de edad. El consejero de Salud, Aquilino Alonso, ha detallado en comisión parlamentaria ésta y otras actuaciones que se están llevando a cabo desde la Administración sanitaria para abordar las patologías retinianas en Andalucía y dar respuesta a la Proposición No de Ley (PNL) aprobada por el Parlamento andaluz sobre esta materia.
Se calcula que en Andalucía existen alrededor de 230.000 personas con problemas de visión por cualquier causa. La principal causa de baja visión es el glaucoma y de ceguera legal la degeneración macular asociada a la edad (DMAE). Por tanto, es un problema frecuente que se asocia al envejecimiento de la población y a la presencia de enfermedades crónicas, bien como complicación (diabetes) o como propia enfermedad (glaucoma).
Para conocer mejor las características de los pacientes con patologías que pueden provocar baja visión en Andalucía, la Consejería de Salud, según un comunicado, ha iniciado este año un primer análisis que tiene como fuente de información la Base de Datos Poblacional de Salud. De él se desprende que hay 99.232 pacientes con al menos un diagnóstico de riesgo de baja visión, con una edad media de 67,1 años; siendo de 64,9 años para los hombres y de 69,2 años para las mujeres. Son estos datos y la evidencia científica disponible lo que justifica que se incluya en el examen de salud el análisis que permita detectar a tiempo las patologías de baja visión y prevenir la ceguera en lo posible.
Toda esta información, así como los compromisos de futuro se ha trasladado en las reuniones mantenidas entre Salud y las asociaciones de pacientes que constituyen la mesa de trabajo creada a instancias de la PNL.
El consejero ha destacado que más del 80 por ciento de los hospitales cuentan con Tomógrafos de Coherencia Óptica, con los que se da cobertura al cien por ciento de la población que requiere de esta prueba. Además, en la cartera de procedimientos del sistema sanitario público para la especialidad de Oftalmología, publicada en septiembre de 2015, se incluyó en todos los hospitales con disponibilidad de Tomografía de Coherencia Óptica, las Inyecciones Intravítreas.
Alonso ha explicado que se ha realizado una revisión bibliográfica sobre el manejo de las inyecciones intravítreas, y tras ésta, se planteó a la Agencia de Evaluación de Tecnologías Sanitarias (Aetsa) que propusiera para el año 2016 el estudio de evaluación 'Inyecciones Intravítreas. Recomendaciones sobre el lugar del Procedimiento (quirófano, consulta, sala de prueba, etcétera)', en el marco del Plan Anual de trabajo de la Red Española de Agencias de Evaluación de Tecnologías Sanitarias y Prestaciones del Sistema Nacional de Salud.
Este estudio fue realizado durante 2016 y publicado recientemente con el título 'Inyecciones intravítreas. Efectividad y seguridad en función del lugar del procedimiento', cuyos resultados demuestran que pueden realizarse tanto en quirófano como en consulta o sala limpia, siempre y cuando se cumplan una serie de medidas de asepsia, como indican las fichas técnicas de los fármacos.
En el año 2016 también se realizó una consulta a 41 hospitales del Sistema Sanitario Público de Andalucía (SSPA), que confirma que se vienen realizando en los ámbitos de quirófano, consulta/sala limpia y hospital de día médico, siempre garantizando que el proceso de atención al paciente se realice en condiciones de asepsia y calidad. Por otra parte, la consulta ha reflejado que los tratamientos se basan en el seguimiento regular del paciente y su retratamiento precoz, buscando evitar pérdidas de visión no reversibles que pueden producirse en las recurrencias de las enfermedades.
Además, Salud ha revisado, con el apoyo de Aetsa en la reunión de la Comisión Autonómica de Cribados Poblacionales y Actividades Preventivas de Detección Precoz, la necesidad de establecer un cribado de degeneración macular asociada a la edad (DMAE) de base poblacional en atención primaria y tras este análisis, se ha concluido que no está indicado este tipo de cribado porque no se conoce bien la historia natural de la enfermedad, la degeneración macular húmeda asociada a la edad suele presentar una evolución clínica muy rápida, en la que un cribado no evitaría los diagnósticos de intervalo.
La degeneración macular seca asociada a la edad no tiene tratamiento en fases iniciales y en fases tardías son tratamientos inespecíficos con suplementos vitamínicos y nutricionales. La húmeda (que puede provenir de una seca) se trata con inyección intravítrea de fármacos antiangiogénicos, no es un tratamiento curativo sino que pretende ralentizar su evolución, no está exento de efectos adversos y se desconocen los efectos a largo plazo
Alonso ha destacado también el Programa de Detección Precoz de Retinopatía Diabética, ya que la población diana identificada con diabetes aproximadamente es de 479.879 personas. El programa recomienda un cribado cada dos años y la cobertura hasta abril de 2017 es del 85 por ciento y representa a 407.897 personas con diabetes, a las que se le han realizado un total de 756.230 pruebas. Con este programa se han detectado 44.245 personas con retinopatía diabética (6,3%), siendo graves el 5,10 por ciento de ellas y unas 23.587 personas con otros problemas oculares no relacionados con la diabetes.
Por otra parte, el consejero ha señalado que en el periodo 2015-2017 en ámbito de las enfermedades degenerativas de la visión, se están desarrollando cinco trabajos en diferentes grupos de investigación en cuatro centros del sistema sanitario público de Andalucía. Además, en los últimos tres años, desde la Consejería se ha promovido y financiado seis proyectos de investigación, que cuentan con la implicación de 39 profesionales.
La Junta colabora con el tejido asociativo que trabaja en este ámbito, con actividades junto a la Asociación Mácula-Retina para la promoción de la investigación. Concretamente, en Andalucía un grupo realiza su investigación en enfermedades de la mácula en Andalucía, dentro del Centro Andaluz de Biología Molecular y Medicina Regenerativa (Cabimer).
Desde finales de 2014, una de las líneas de investigación que se lleva a cabo en el grupo se centra en el estudio de la Degeneración Macular Asociada a la Edad (DMAE), primera causa de ceguera del adulto en el mundo occidental y para la que, actualmente, no hay tratamientos efectivos ni existe un modelo animal completo de la enfermedad que permita evaluar la eficiencia de nuevos tratamientos en su fase pre-clínica.
Por otro lado también se está llevando a cabo el proyecto titulado 'Estudio Pre-Clínico de Seguridad y Eficacia del Trasplante Celular de Epitelio Pigmentario de la Retina crecido sobre matriz de Fibrina-Agarosa para el tratamiento de la Degeneración Macular Seca'.
Por último, el consejero ha señalado, en cumplimiento de la PNL aprobada por el Parlamento, que Salud está trabajando en compromisos como la creación del grupo de trabajo de necesidades sociosanitarias, la revisión de la situación del procedimiento de la Inyecciones Intravítreas (IIV) en los diferentes hospitales públicos de Andalucía, la solicitud de un posicionamiento oficial sobre las salas limpias a la sociedad andaluza de oftalmología y el fomento de la investigación en este ámbito.