SEVILLA 9 Mar. (EUROPA PRESS) -
El Área de Gestión Sanitaria Sur de Sevilla ha recibido su acreditación como centro comprometido contra la violencia de género durante la celebración de la Jornada '8M: Salud y Género', organizada por la Dirección General de Salud Pública y Ordenación Farmacéutica de la Consejería de Salud y Consumo en colaboración con la Escuela Andaluza de Salud Pública, con motivo de la conmemoración del Día Internacional de la Mujer.
Dicho evento ha sido inaugurado por la consejera de Salud y Consumo, Catalina García, y se ha retransmitido vía online para todas las provincias andaluzas, facilitando la participación de las diferentes delegaciones territoriales. En el caso de Sevilla, el acto de entrega ha sido presidido por la delegada territorial del ramo Regina Serrano, según ha informado la Junta en un comunicado.
Este reconocimiento es producto de la "superación de un proceso de evaluación" realizado por la Agencia de Calidad Sanitaria de Andalucía (ACSA), a través de la cual se valora la labor de los centros del sistema sanitario público andaluz en la atención a las víctimas y en la lucha contra la violencia de género.
Al respecto, este "logro" del Área de Gestión Sanitaria Sur de Sevilla es fruto de la labor de los profesionales que componen su Comisión Interdisciplinar contra la Violencia de Género, que trabaja para "identificar mejoras" y ofrecer "la mejor atención posible" a las víctimas. La evaluación de la ACSA requiere la revisión de 31 estándares de calidad, de los cuales es "imprescindible" para la obtención del certificado cumplir 24, incluidos los 17 definidos como esenciales.
Estos estándares abordan diferentes aspectos relacionados con la asistencia y la gestión de los centros, como la formación de los profesionales, los sistemas de detección, intervención y seguimiento de casos, la coordinación con los equipos de atención individualizada y las otras administraciones, así como la sensibilización, la prevención y el trabajo comunitario, entre otros.
En el Informe de Evaluación, se destaca como "punto fuerte" de este área sanitaria la formación. Es decir, se pone el acento en el hecho de que sus centros sobresalen en "preparar y formar" a sus profesionales para que sean capaces de ofrecer "la mejor atención posible" a las víctimas de violencia de género y "en favorecer" la investigación en esta materia.
En este área se promueve entre los profesionales la "sensibilización y formación" en esta temática. Cuenta con, al menos, un profesional de referencia experto en esta materia. Se favorece que sus profesionales participen en actividades científicas relacionadas con la violencia de género. Dispone de protocolos y procedimientos para detectar los casos.
Evalúa y tiene instaurada la mejora continua en la atención de las víctimas y se coordinan con otras instituciones de ayuda para priorizar aquellos casos preferentes. Dispone de un catálogo actualizado de recursos accesibles para las víctimas, además de facilitar informes de salud e informes sociales completos a las mujeres víctimas de violencia de género y a otras instituciones.
El programa de certificación 'Centros Comprometidos contra la Violencia de Género' surgió con la finalidad de revisar la situación de partida en la atención que reciben las mujeres víctimas de maltrato; así como sus hijos e hijas por parte de los profesionales sanitarios y no sanitarios de la sanidad pública andaluza.
Seguidamente, trabaja en introducir pautas que permitan mejorar la calidad de la asistencia que se presta a este problema de Salud Pública tan importante y prevalente en la sociedad actual, teniendo en cuenta además que en numerosas ocasiones son los primeros en detectar casos de violencia de género y atender a las víctimas.
De acuerdo con los datos disponibles, se estima que casi la mitad de las mujeres expuestas a violencia de género buscan ayuda en los centros sanitarios, por lo que los profesionales de la red sanitaria tienen una "posición de privilegio" para la detección y abordaje de este tipo de violencia.
Por tanto, este certificado constituye un "reconocimiento público" a la labor de los profesionales de primera línea y de los equipos directivos, posibilitando a las mujeres identificar a los centros sanitarios como "entornos seguros y capacitados" en el abordaje de la violencia de género, con profesionales entrenados, con medidas de detección, intervención y coordinación para cada caso, y con un seguimiento activo y continuado.