El presupuesto de 2018 asciende a 34.759 millones y el gasto en inversión pública sube un 1,2%

Las cuentas andaluzas contemplan un crecimiento de la economía andaluza del 2,6% y la creación de 80.400 empleos

SEVILLA, 10 Oct. (EUROPA PRESS) -

   El Consejo de Gobierno de la Junta de Andalucía ha aprobado este martes el proyecto de Presupuesto de la Comunidad Autónoma de Andalucía para 2018, que asciende a 34.759 millones de euros, un 4,6 por ciento más, de los que 30.628 millones se destinan a desarrollo de políticas --que se incrementa un 3,9 por ciento respecto a 2017--, según ha indicado la consejera de Hacienda y Administración Pública, María Jesús Montero, que precisa que el gasto en inversión pública aumenta un 1,2 por ciento hasta los 3.709 millones de euros.

   La consejera ha resaltado que Andalucía es, de nuevo, "la primera comunidad que presenta las cuentas públicas del próximo año", lo que denota la "estabilidad" de Andalucía, que muestra que la comunidad "funciona". El presupuesto, que será remitido al Parlamento andaluz para su debate y aprobación, tiene como prioridades "la revitalización de los servicios públicos y la creación de empleo, así como la recuperación de derechos".

   De esta forma, la cifra real del presupuesto asciende a 34.759 millones, de los que los citados 30.628 millones se destinan a gasto no financieros, mientras que la cifra restante se destina al pago de la deuda, de la que en su mayor parte se destina al abono de  intereses del Fondo de Liquidez Autonómica (FLA), ha aclarado la consejera.

   Para lograr estos objetivos, el gasto en inversión pública aumenta en un 1,2 por ciento hasta los 3.709 millones de euros, lo que supone un 2,2 por ciento del Producto Interior Bruto (PIB) regional.

   La consejera ha resaltado, entre otras medidas, el hecho de que el Servicio Andaluz de Salud (SAS) tenga "el mayor presupuesto de su historia", con 9.013 millones, además de medidas como que ningún empleado de la Junta a jornada completa gane menos de 1.000 euros, entre otras medidas, como la renta mínima de inserción social, a la que se dedican 198 millones, o la bonificación de las matrículas universitarias.

   Montero ha resaltado que estas cuentas, definidas como "sociales", garantizan "la estabilidad para Andalucía, hacen hincapié en la recuperación de derechos, alivia la carga fiscal para los trabajadores y apuesta por la creación de empleo; la comunidad se instala en la generación de riqueza y empleo, sin titubeos; y tenemos que lograr que la recuperación llegue a las familias mediante más renta y mejores servicios públicos".

   La consejera ha precisado que el proyecto de presupuestos contempla un aumento de la economía andaluza del 2,6 por ciento, de forma que "sigue creciendo por encima de la media de Europa, y crece más rápido", un crecimiento que viene impulsado por el sector exterior.

   De esta forma, en 2018 Andalucía "va a alcanzar el PIB más elevado de su historia, con la generación de riqueza más elevada", con un PIB nominal de 166.000 millones "que supone 14,6 puntos por encima del PIB de 2013".

   En cuanto a la generación de empleo, la previsión para 2018 es de crear 80.400 nuevos empleos para el próximo año en la comunidad.

   Montero reconoce que echa en falta las inversiones de los Presupuestos Generales del Estado, que "limitan el desarrollo", por lo que ante esa "incomparecencia" "se acentúa la presencia de la Junta".

   La consejera de Hacienda y Administración Pública ha destacado que estos indicadores económicos son positivos "a pesar de que el agravio del sistema de financiación autonómica obliga a la comunidad a aportar más recursos propios a los servicios públicos, 2.197 millones de euros, lo que impide aumentar el nivel de inversiones". No obstante, estas serán de 3.709 millones, lo que supone el 12,1 por ciento del gasto no financiero, "un esfuerzo titánico, que dobla al del Estado".

AUMENTO EN ÁREAS SOCIALES

   Ha resaltado la importancia de las partidas sociales, de forma que ocho de cada diez euros del gasto no financiero se destina a gasto social "y cubre con recursos propios la infrafinanciación del Gobierno".

   Así, ha resaltado el incremento del 3,8 por ciento en educación y universidades, hasta 7.527 millones; los servicios sociales y dependencia se elevan un 7,2 por ciento --con 2.132 millones para servicios sociales, y de ellos las partidas de dependencia ascienden a 1.214 millones--; y las partidas de salud crecen un 5,4 por ciento, hasta 9.809 millones, de modo que éstas últimas suponen un tercio del total presupuestado (29 por ciento).

   Ha apuntado que los 9.103 millones de presupuestos del SAS "permitirá mantener la cartera de servicios sin copagos y atender nuevos ámbitos que requieren de mayor financiación, como la atención temprana infantil, a la que se destinan 28,8 millones de euros". También se refuerza la Atención Primaria con la contratación de más de 1.500 sanitarios.

   En el ámbito educativo, Montero ha indicado que en la Consejería de Educación, "el aumento podría haber alcanzado el cinco por ciento, si el Gobierno no se hubiese retirado de la financiación de la Lomce, lo que se traduce en 81 millones menos". No obstante, la Junta ha reforzado este curso las plantillas docentes "con el mayor incremento de los últimos 10 años". Por su parte, universidades absorbe 1.536 millones.

   En 2018, las pensiones asistenciales crecerán un dos por ciento, por encima de la subida del Estado para las contributivas. Además, se pone en marcha la Renta Mínima de Inserción Social.

   El próximo año se impulsará la tramitación de la nueva Ley de Igualdad y se reforzarán las políticas de igualdad, con un aumento presupuestario del 3,8 por ciento. La partida de Justicia también crece un 4,6%, hasta 505 millones.

CUENTAS "SOLVENTES Y SOSTENIBLES"

   Montero ha destacado que Andalucía mantiene unas cuentas "solventes y sostenibles que permiten aprovechar al máximo el margen para que la recuperación llegue a las familias".

   Esta gestión permite "reducir impuestos a clases medias y aumentar el gasto social". Además, ha recordado que la Junta "cumple con objetivos de déficit y deuda y con el periodo medio de pago a proveedores".

   Montero ha recordado que a partir de enero, se aplicará una nueva reforma del Impuesto de Sucesiones y Donaciones, sobre el que ha explicado que, pese a la bajada de recaudación que provoca, los ingresos por tributos gestionados por la comunidad suben en 85,6 millones.

   En total, la comunidad contará con 1.344 millones de euros más en ingresos financieros que, tras aplicar el ajuste obligado del déficit, pasan a sumar 1.151 millones, la cantidad adicional para dedicar a gasto no financiero en 2018, un 3,9 por ciento más que en este ejercicio.

PARTIDAS PARA EMPLEO

   Asimismo, el proyecto consigna 2.183 millones a partidas para dinamizar la economía y fomentar la creación de nuevos empleos. En este ámbito, la mejora de la cualificación se canaliza a través de la Formación Profesional para el Empleo, con 239 millones. Asimismo, se presupuestan 766 millones para Empleabilidad e Intermediación, que incluye un programa de empleo industrial (308 millones).

   La partida para potenciar el desarrollo económico crece un 4,2 por ciento, hasta 546 millones, y financiará incentivos dentro de la Estrategia Industrial, los planes de restauración minera, el comercio interior, el fomento de la artesanía y el impulso de las tecnologías, entre otros. Se mantienen programas de cooperación con los municipios (1.139 millones, un 7,8 por ciento más), infraestructuras (545 millones, un 5,3 por ciento más); y políticas de vivienda como elementos de vertebración territorial.

   Para políticas medioambientales se recogen 777 millones. En 2018 se consignan 120 millones más a potenciar el turismo, mientras que las partidas de agricultura y pesca crecen un 4,8 por ciento hasta 677 millones. Las partidas vinculadas a cultura crecen un 5,1 por ciento y llegan a 202 millones; y deporte dispondrá de 56 millones.