SEVILLA 31 Ago. (EUROPA PRESS) -
La Unidad de Trabajo Social del Hospital Universitario Virgen del Rocío de Sevilla ha atendido a 4.462 pacientes y familiares a lo largo de 2016 por sospecha de riesgo social o por sufrir problemas sociales que agravan su enfermedad. En concreto, un total de 3.995 personas han sido asistidas en primera consulta y otras 667 en consultas de información solo el año pasado.
Así, en un comunicado, el Hospital Virgen del Rocío ha indicado que estos profesionales han realizado 7.266 consultas de seguimiento individual o con familiares para el tratamiento social de los pacientes. Además, han realizado 9.072 intervenciones coordinadas con los servicios sociales especializados de la ciudad, con idea de seguir dando respuesta a las necesidades socio sanitarias de la ciudadanía más allá de su paso por los hospitales.
Del mismo modo, han efectuado otras 5.062 actuaciones junto a las trabajadoras sociales de los centros de salud de Sevilla, lo que supone más de 14.000 atenciones que garantizan la continuidad de la atención social dentro del sistema sanitario.
En la actualidad, la Unidad de Trabajo Social dispone de cuatro puntos de atención en el Hospital Virgen del Rocío (en el Hospital General, Hospital de Rehabilitación y Traumatología, Servicio de Cuidados Críticos y Urgencias y Hospital Infantil).
Los trabajadores sociales son el enlace entre el sistema sanitario y el resto de sistemas de protección social y la comunidad. Analizan, evalúan, diagnostican y tratan los factores sociales que condicionan la salud del paciente, y cómo repercute la enfermedad en su área personal, familiar y social. El objetivo es que el usuario sepa adaptarse y superar las dificultades que haya originado su patología antes de recibir el alta médica.
Asimismo, la Unidad de Trabajo Social del Hospital Virgen del Rocío ha adoptado tres líneas de trabajo específico. La primera de ellas es la atención social a adultos, que incluye programas de intervención social en la Unidad de Cuidados Críticos y Urgencias, la planificación del alta hospitalaria para proporcionar una adecuada vuelta a la comunidad; y la emisión de informes que avalen la idoneidad de inclusión de las personas en el programa de trasplante de donante vivo.
De igual forma, trabajan en otra línea de Intervención Social con Mujer e Infancia, centrada en la aceptación de los diagnósticos adversos y las sospechas del maltrato. La línea de Intervención Social en Salud Mental, por último, favorece la atención biológica, psicológica, social y la reinserción de estos pacientes desde los diferentes dispositivos (las unidades de agudos, las unidades de rehabilitación, las comunidades terapéuticas, y la Unidad de Salud Mental Infantojuvenil).
VOLUNTARIADO Y ASOCIACIONES
Los trabajadores sociales que prestan servicio en el Hospital Virgen del Rocío son, de este modo, el enlace entre el sistema sanitario y el resto de entidades responsables de la protección social y la acción comunitaria.
Por ello, coordinan además a 289 voluntarios y 30 asociaciones u organizaciones vinculadas que realizan diversos programas sociales que incluyen desde el acompañamiento del paciente que está solo durante su ingreso o su tratamiento, la organización de actividades de entretenimiento para los menores hospitalizados, o la posibilidad de ceder una manutención básica y alojamiento a familias de otras provincias y sin recursos que han de pasar largas temporadas en el hospital y que son actividades complementarias a la asistencia sanitaria ofertada por el centro hospitalario.
Por último, la labor que realiza la Unidad de Trabajo Social Sanitaria se integra en la cartera de servicios del Sistema Nacional de Salud. La Unidad cubre las tres áreas de intervención del Trabajo Social como disciplina: Trabajo Social Individual o de Caso, Trabajo Social de Grupo y Trabajo Social Comunitario, todas ellas interrelacionadas entre sí y no excluyentes.
El trabajador social sanitario es imprescindible para que el sistema sanitario pueda proporcionar una verdadera atención integral a la salud de la población. La atención integral es el resultado de la intervención interdisciplinar donde los aspectos sanitarios y sociales son tratados por profesionales especializados, tanto en uno como en otro caso.