BRUSELAS 4 Jun. (EUROPA PRESS) -
La Comisión Europea ha confirmado este viernes la resistencia europea a una suspensión generalizada de las patentes de las vacunas contra el coronavirus, como piden India y Sudáfrica con el apoyo de Estados Unidos, si bien ha apuntado como alternativa a las licencias obligatorias a precios asequibles.
De la liberalización temporal de las patentes, desde Bruselas insisten en que el Ejecutivo comunitario "no está convencida de que sea la mejor respuesta inmediata" para asegurar un aumento de la producción y distribución de vacunas suficiente para atender las necesidades actuales en todo el mundo.
Por eso la UE se mantiene abierta a tener este debate en el largo plazo pero considera que se debe actuar primero para asegurar que ningún país pone trabas a la exportación de vacunas o de sus componentes --como ha reprochado a Estados Unidos o Reino Unido--, ayudar también a los fabricantes para que eleven su producción y, finalmente, facilitar las licencias obligatorias.
Así consta en la propuesta que la Comisión ha remitido en nombre de la UE a la Organización Mundial del Comercio (OMC) para contribuir al debate abierto en este foro internacional sobre cómo aumentar de manera urgente el suministro de vacunas, sobre todo a los países pobres o más vulnerables.
La propuesta comunitaria va acompañada por otro documento específico sobre la propiedad intelectual que se discutirá la semana próxima en un comité experto en esta materia también en el seno de la OMC. El texto detalla los tres pilares que presenta este viernes Bruselas y defiende que son el modo de alcanzar los objetivos deseados de la manera "más rápida y efectiva" posible.
En el caso de las licencias, el Ejecutivo comunitario sostiene que las licencias "voluntarias" son el método más eficaz para ampliar la producción y mejorar el intercambio de información, pero concede que si esta vía no se aplica entonces se debe animar a los gobiernos a imponer las licencias "obligatorias".
Las autorizaciones de tipo voluntario ofreces el marco para que el laboratorio que ha desarrollado la vacuna y un fabricante cooperen, por ejemplo intercambiando información y datos sobre tecnologías esenciales.
Pero Bruselas cree que en una situación de pandemia las licencias obligatorias pueden ser un recurso adecuado cuando no se producen las voluntarias, ya que permiten a un gobierno conceder una licencia acotada a un productor concreto aún sin el consentimiento del laboratorio propietario de la patente siempre que se le ofrezca una remuneración adecuada.
"La pandemia es una circunstancia excepcional de emergencia nacional en la que, si es necesario, se puede eximir legítimamente del requisito de negociar con el titular de los derechos", sostiene el Ejecutivo comunitario.
De este modo, la propuesta de la Comisión pide acordar en el marco de la OMC que la licencia obligatoria pueda cubrir toda exportación de vacunas destinadas a países sin capacidad de producción o a los envíos realizados a través del mecanismo internacional Covax.
"Tenemos que concentrarnos urgentemente en propuestas que aceleren la distribución equitativa de las vacunas contra la COVID-19 en todo el mundo. Por eso, una respuesta comercial multilateral firme podría dar un gran impulso a la lucha contra la COVID-19", ha defendido el vicepresidente del Ejecutivo comunitario responsable de Comercio, Valdis Dombrovskis, sobre esta iniciativa.