La Comunidad desea avanzar en descarbonización pero es "escéptica" con el límite de 2050 fijado por la directiva europea

El Parlamento Europeo puso límites más estrictos para varios contaminantes atmosféricos

MADRID, 21 Dic. (EUROPA PRESS) -

La Comunidad de Madrid quiere avanzar en la descarbonización y asegura que la calidad del aire es "innegociable" pero se ha mostrado muy escéptica con el límite de 2050 como objetivo de "contaminación cero" marcado por la nueva directriz aprobada hace unos días por el Parlamento Europeo.

En un reciente Desayuno organizado por Europa Press, el consejero de Medio Ambiente, Agricultura e Interior, Carlos Novillo, se mostró escéptico en marcarse fechas tan concretas. "Parece que en 2050 vamos a tener toda la neutralidad, pero nos va a arrastrar y llevar por delante. No sé si lo vamos a tener", indicó.

Novillo, que estuvo la semana pasada en Bruselas y conoció al nuevo comisaría de Agricultura, Christophe Hansen, ha señalado que en la Unión Europea hay "nuevos aires" y la nueva Comisión "va a aterrizar más los problemas y ver que todos los cambios que se van a producir tienen que ser justos, ir de la mano de la industria y la competitividad".

"Con los cambios en el panorama internacional en EEUU, con lo que está pasando todavía con Rusia y China, hay que ser coherentes con esas políticas. Hay que avanzar hacia la descarbonización, evidentemente, por un problema sobre todo de salud. La calidad del aire es innegociable, hay que mejorar. Pero sobre el cambio climático, España y Madrid representamos el 0,004 por ciento en la influencia en la emisión de gases", esgrimió.

El titular regional de Medio Ambiente recordó que hay países que para fabricar coches eléctricos están quemando carbón y eso es "la contradicción en la que vive el mundo". "Es verdad que en las exigencias hay que ver un poco como el nuevo Gobierno europeo va a acelerar un poco el ritmo y hay que tenerlas previstas. De ahí que el Ayuntamiento de Madrid y otros grandes municipios estén dando pasos", apuntó.

LA DIRECTIVA EUROPEA

La directiva europea, que entró en vigor este martes 10 de diciembre, endurece los límites de calidad del aire para los principales contaminantes, como las partículas finas y el dióxido de nitrógeno, con el objetivo de avanzar hacia la meta de "contaminación cero" en 2050.

La norma, que los estados miembros tendrán dos años para integrar en sus legislaciones nacionales, establece estándares más estrictos de calidad del aire para 2030, con valores límite y objetivos más alineados con las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y que serán revisados periódicamente.

Desde su entrada en vigor, los Estados miembros deberán tomar medidas si se superan los límites establecidos, lo que incluye la elaboración de hojas de ruta y la implementación de acciones de emergencia en zonas de alta concentración de contaminantes.

La normativa también otorga a los ciudadanos el derecho a reclamar compensación por daños a la salud debido a incumplimientos, y establece sanciones para los infractores.

Además, los países de la UE podrán solicitar aplazamientos en los plazos de cumplimiento hasta 2040 para regiones con condiciones geográficas adversas, siempre que garanticen una reducción progresiva de los niveles de contaminación.

INDEMNIZACIONES POR DAÑOS A LA SALUD

Este marco normativo surge de un proceso legislativo iniciado en octubre de 2022 con una propuesta de la Comisión Europea, cuyo objetivo era endurecer los estándares de calidad del aire conforme a las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS).

En febrero de 2024, el Parlamento Europeo y el Consejo de la Unión Europea alcanzaron un acuerdo provisional tras un proceso de codecisión para ajustar la propuesta inicial. Dos meses después, en abril de 2024, el Parlamento ratificó su posición final estableciendo límites más estrictos para los contaminantes y garantizando derechos como el acceso a la justicia y la indemnización por daños a la salud.

Finalmente, el Consejo de la UE dio su aprobación formal el 14 de octubre de 2024, culminando un procedimiento que ha concluido con la publicación de la directiva en el DOUE, el 20 de noviembre, y entró en vigor el 10 de diciembre.